Municipios santafesinos advirtieron a la provincia que sin asistencia peligra la paz social

Reclaman el urgente envío de fondos de las leyes de Coronavirus y Necesidad Pública. Y la distribución de Aportes del Tesoro Nacional. Denuncian que están al borde del colapso financiero.

Reclaman el urgente envío de fondos de las leyes de Coronavirus y Necesidad Pública. Y la distribución de Aportes del Tesoro Nacional. Denuncian que están al borde del colapso financiero.

“Señor gobernador Omar Perotti: usted fue intendente y sabe que los municipios somos la primera ventanilla de la Democracia, donde acuden los vecinos frente a cualquier crisis. De la crisis vamos a salir con el esfuerzo conjunto de todos”, señala, con tono apremiante, la misiva remitida esta semana al titular del Casa Gris por los integrantes del Foro de Intendentes y Presidentes de Comuna de la provincia de Santa Fe.

Los jefes distritales del radicalismo insistieron, por enésima vez, en reclamar el giro de fondos necesarios y comprometidos para afrontar la pandémica situación desatada por la emergencia sanitaria de coronavirus, y de partidas que ayuden a sobrellevar la acuciante situación financiera que atraviesa las administraciones locales.
Esta vez, el tono utilizado por los intendentes y presidentes de comuna fue aún más perentorio que en ocasiones anteriores. “Los municipios pedimos la asistencia del gobierno provincial para seguir manteniendo la paz social en nuestras localidades”, aseguraron.

Para, acto seguido, dejar constancia de que “el Foro manifiesta su profunda preocupación ante la falta de respuestas del gobierno provincial”. “Es sumamente necesaria esta asistencia para poder coordinar acciones con el gobierno de la provincia, trabajar eficazmente en la prevención de la propagación del virus y asistir alimentariamente a los más necesitados en nuestras comunidades”, argumentaron.

Los mandatarios radicales agregaron que es imperioso el envío de ayuda de la provincia por la necesidad de pagar los salarios y el aguinaldo en tiempo y forma, a lo que calificaron como “estratégico para poder mantener las ganas y la moral de nuestros trabajadores, quienes siguieron manteniendo el funcionamiento de los servicios básicos en los peores momentos”.

Puntualmente, por los motivos expuestos solicitaron al gobierno provincial en carácter de urgencia la remisión de aportes contemplados en leyes aprobadas por la Legislatura.

En primer lugar, citaron el Fondo Ley de Coronavirus, sobre el cual requirieron una distribución equitativa de los $ 1.000 millones aprobados por esta ley, de los cuales solo se distribuyeron $ 309 millones.

En segundo término, demandaron el pago inmediato de los saldos aplicables a gastos corrientes de Obras Menores en el marco del Fondo Ley de Necesidad Pública. Por último y con relación a recursos del Estado nacional, exhortaron a su distribución a través de índices de coparticipación. Se trata de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) recibidos del gobierno nacional.

Crisis
La crisis económica y social golpea de lleno en las arcas municipales, al punto de que más allá de que la gran mayoría, sino la totalidad, de los municipios y comunas de la provincia implementen economías de guerra, con reducciones de sueldos de sus planteles políticos y prestaciones solo indispensables de servicios, la plata no alcanza.
Esta nueva realidad que venía agudizándose dramáticamente en los meses previos a la cuarentena se tornó todavía más compleja, con el desmejoramiento de los niveles de empleo, changas y trabajos temporarios, producto del aislamiento obligatorio, y el incremento sostenido de precios de insumos necesarios para el funcionamiento.

El cuadro se vuelve más sombrío si se tiene en cuenta que la provincia redujo su funcionamiento a un mínimo histórico que implicó, por ejemplo, el atraso del envío de partidas para los Centros de Cuidados Infantiles, que están sin convenio y cuya última cuota fue percibida en octubre.

Lo propio sucede con Niñez, la última cuota se pagó en marzo; los comedores, la última cuota (doble) se percibió en febrero; y la prevención de adicciones, sin convenio, cuyo último pago se remonta a diciembre.

Peor aun es lo que ocurre con gastos corrientes de Obras Menores 2018, 2019 y 2020, que se encuentran demorados y sin novedades. Al igual que los fondos para planes de pavimentación para municipios y comunas, que figuran impagos.

La misma suerte aciaga corren los planes de viviendas, programas en lotes propios, y las obras provinciales, hoy por hoy una especie de utopía.

Fuente: El Litoral