Neuquén fue la tercera provincia con más empresas beneficiadas del ATP

La proporción de empleadores que recibió el subsidio del Estado Nacional fue del 60%. Sólo quedó detrás de la Ciudad de Buenos Aires y Tierra del Fuego. El parate de la industria petrolera y la situación sanitaria, algunas de las claves.

La proporción de empleadores que recibió el subsidio del Estado Nacional fue del 60%. Sólo quedó detrás de la Ciudad de Buenos Aires y Tierra del Fuego. El parate de la industria petrolera y la situación sanitaria, algunas de las claves.

Un 60% de las empresas de Neuquén recibieron aportes del programa Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) para paliar los efectos de la pandemia, porcentaje que ubicó a la provincia como la tercera con mayor alcance a nivel nacional.

Un reciente informe del Centro de Estudios para la Producción XXI del ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación detalló que fueron 306.000 los empleadores beneficiarios del subsidio a nivel nacional, un 55% del total. Esta cifra llega a 338.000 si se incluye a 32.000 empresas que no percibieron salarios pagados por parte del Estado pero sí el beneficio de la postergación o reducción de contribuciones patronales.

El promedio general, sin embargo, estuvo marcado por diferencias territoriales, tal como ocurrió con el impacto económico y comercial que provocó la pandemia del coronavirus en el país.

El estudio del CEP XXI reveló que las provincias con una especialización mayormente agroindustrial “tendieron a estar menos afectadas en términos relativos que aquellas provincias especializadas en actividades no esenciales”, a lo que se sumó como factor la dinámica sanitaria y consecuente circulación o no de las personas.

En cuanto al impacto del ATP sobre las empresas, la Ciudad de Buenos Aires fue la jurisdicción con el guarismo más elevado, del 65%. Por detrás de la capital federal, sólo cinco provincias superaron la media nacional: Tierra del Fuego con un 63%, Neuquén con 60%, Buenos Aires con el 57% y Santa Cruz y Chubut con un 56%. Río Negro quedó por debajo del promedio con un 53%.

El informe ubicó tres razones para explicar lo que ocurrió en las provincias patagónicas: la baja especialización agropecuaria; la mayor participación del turismo en las economías; y el desplome de los precios del petróleo. Por otra parte, se consideró que las provincias patagónicas fueron más afectadas en términos relativos por el covid-19 que el resto.

Esto también se vio reflejado en la actividad comercial de octubre, último registro oficial relevado por el informe del CEP XXI.

Durante ese mes, se observó una performance similar a la de septiembre, con la mediana del comercio cayendo en torno al 5% real en el promedio del país. Al igual que en septiembre, las provincias del noreste argentino, Santa Fe y Entre Ríos volvieron a ser las regiones de mejor desempeño, con crecimiento interanual de hasta el 10%.

En el otro extremo, Neuquén encabezó los guarismos de peor detracción, con -17,8%. Le siguieron San Luis (-14,1%), Tierra del Fuego (-13,6%), Tucumán (-13,5%), Santa Cruz (-12,6%) y la CABA (-12,4%). Salvo en la Ciudad de Buenos Aires, en todas estas provincias hubo contagios crecientes en octubre.

Neuquén tuvo su pico el 23 de ese mes con 817 casos reportados en un solo día y debió volver a tomar medidas restrictivas ante la saturación del sistema sanitario, con un mes de ocupación total de sus terapias intensivas.

En números
-17% fue la caída real de la actividad comercial durante octubre en Neuquén, el peor mes de la pandemia.

13.500 trabajadores registrados perdió la provincia en septiembre del 2020 en relación a igual mes del 2019.

Fuente: Río Negro