Nuevo Presupuesto, misma motosierra y el bocado neuquino de 2025
Las abrumadoras cifras del ajuste que se confirman. Y las que vienen, desnudarán parte de una trama imprevisible.
11/09/2024 OPINIÓNLas abrumadoras cifras del ajuste que se confirman. Y las que vienen, desnudarán parte de una trama imprevisible.
Antes del 15 de septiembre el gobierno nacional debería estar presentado el proyecto de Presupuesto 2025, el primero de la gestión de Javier Milei y cuyos alcances podrían ser una verdadera caja de pandoras a la luz de lo que ocurrió este año y que, por efectos de la motosierra, golpeó sensiblemente tanto a las provincias como a los municipios.
En efecto, un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) conocido este sábado, advirtió que, en lo que va de los ocho meses de la actual gestión, se detectó una fuerte caída de la ejecución real del actual Presupuesto respecto al mismo período de 2023, del orden del 30%, lo cual, en buen romance, implica un durísimo ajuste del gasto público en áreas sensibles.
Según el informe, en materia de obra pública, el escenario es de una paralización casi total de las partidas presupuestarias, con caídas cercanas al 100% en programas como el de Apoyo para Infraestructura en Municipios, Obras de Seguridad en Rutas Nacionales, y Desarrollo de Infraestructura Hidráulica.
En materia de transferencias del Tesoro Nacional a las provincias y municipios, subraya el dossier, los ajustes son muy marcados como por ejemplo el referido a Asistencia Financiera a Provincias y Municipios (-99%), y la Asistencia Técnica a Municipios (-93%).
La situación general de la Administración Pública, subraya CEPA, es de una fuerte reducción de su ejecución presupuestaria. Reducción, recuerda el informe, que en algunos casos está llevando a la paralización de programas de alto impacto en términos sociales, y de salud de la población. Incluso en un escenario recesivo, tampoco se están ejecutando programas de ayuda social, y de estímulo al desarrollo productivo, remarca el informe. Tampoco es menor el ajuste en materia educativa, donde se observan, dice CEPA, fuertes caídas en la ejecución de partidas no menos sensibles como el Fondo Nacional de Incentivo Docente (-97% en la ejecución base caja).
Presentación en persona
Durante la semana pasada, Milei señaló que él mismo en persona llevará el proyecto presupuestario de 2025. No está claro si se tratará de una puesta en escena o de una convocatoria especial de la comisión que preside José Luis Espert. Es que no está previsto por la legislación la posibilidad de ninguna presentación de alcance oficial por parte de un primer magistrado ante el Congreso, a menos que se trate de una Asamblea Legislativa, cuya convocatoria no puede llevarse a cabo para este fin.
El derrotero del proyecto, teniendo como antecedente la Ley Bases, puede confirmar aquella presunción de la apertura de una eventual caja de pandoras y hay quienes no descartan que Milei prefiera, tal como ya le ocurrió a Sergio Massa, tener que gestionar con ejecuciones presupuestarias, más cómodas para ser utilizadas unilateralmente o con mecanismos de premios y castigos, dependiendo del caso.
El 2025 será un año electoral en el que el gobierno buscará ampliar su base de sustentación parlamentaria, por lo cual el pretendido déficit cero supondría no transigir en aquellos distritos en los cuales se juegan cartas fuertes como en el caso de Neuquén, donde, además de dos bancas de diputados nacionales, se pondrán en juego la tres del Senado, Cámara más que estratégica para los planes de Milei.
Este será el telón de fondo de un largo año proselitista que ya se cocina a fuego lento y que se perfila marcado por el ajuste fiscal, la consolidación de los ajustes a las provincias/municipios y una inercia recesiva que no para de retroalimentarse. Por lo tanto, en este mismo esquema, el armado político/electoral en ciernes del gobernador Rolando Figueroa, evidentemente, no pierde de vista ninguno de los cargos que se pondrán en disputa el año que viene, en el que la suerte de Neuquén no está a resguardo de las imprevisibles derivaciones de las disputas nacionales.
Por Alfredo Enriqueenriquea