Otra vez el Paraná en alerta por lluvias en la alta cuenca

Mientras sigue lentamente en bajante, los pronósticos indican que el Paraná podría volver a crecer en los próximos diez días.

Mientras sigue lentamente en bajante, los pronósticos indican que el Paraná podría volver a crecer en los próximos diez días.

Los pronósticos para los próximos días y las precipitaciones registradas esta semana ponen nuevamente en alerta a la región por el nivel del Paraná, que mantiene un caudal alto en el tramo argentino-paraguayo. Allí, según el último informe del Instituto Nacional del Agua (INA), se pronostican lluvias intensas de entre 120 y 200 milímetros para los próximos días. Ese contexto podría significar un repunte del nivel del río en las costas chaqueñas, aunque por el momento sigue la tendencia decreciente y ayer al mediodía marcó 5,97 metros en Barranqueras.

“Durante el fin de semana debemos estar atentos al Iguazú, para ver cuánto llovió y el lunes habrá una idea general del comportamiento que podrá tener el río para la semana entrante”, le dijo a NORTE Hugo Rohrmann, director del Área Estudios Básicos de la Administración Provincial del Agua (APA).

La nueva onda de crecida del Paraná podría llegar a estas costas dentro de una semana o diez días, y su gravedad dependerá de la continuidad de las precipitaciones, que en Misiones podrían ser abundantes y llegar a los 200 mm. Sin embargo, el río no alcanzaría los niveles que se registraron días pasados en el pico de la creciente.

“Ahora la atención debe centrarse en el Iguazú, porque estuvo lloviendo y hay perspectivas de lluvias abundantes. En la cuenca se registraron valores variables entre 30 y 130 milímetros; y se espera un repunte que se verá el domingo o el lunes. A partir de ahí se definirá la magnitud de la crecida, que será menor que la reciente”, indicó el especialista.

Ayer al mediodía el Paraná marcó en Barranqueras 5,97 metros, en descenso lento pero constante. Y las perspectivas indican que este fin de semana continuará esa tendencia. Sin embargo, las lluvias en Misiones desde principios de la semana, con registros de 200 mm en Posadas, hicieron levantar el nivel del embalse y el caudal de erogación de la represa de Yacyretá.

“En tres o cuatro días se frenará la bajante y habrá un repunte, originado sólo por las lluvias registradas en Misiones y por las erogaciones de Yacyretá. Ahora, si llueve en el Iguazú significa que puede haber una creciente de magnitud”, sostuvo Rohrmann. Así, estimó que, de darse esas condiciones, en una semana o diez días podría sentirse en estas costas “un nuevo repunte” en el nivel del río. Resaltó además que el nivel continúa alto, cercano a los 6 metros, lo que agudiza todavía más el panorama para el futuro cercano.

El reporte del INA señala que en la confluencia Paraná-Iguazú el caudal descendió de 14.200 m3/s el miércoles a 8800 m3/s el jueves. Y advierte que “se espera una reversión de la tendencia descendente durante el fin de semana”. La lectura de escala de Puerto Iguazú subió de 15,40 m el miércoles a 17,60 m el jueves, y es probable que vuelva a superar los 20 m en el corto plazo.

El aporte en ruta del tramo misionero-paraguayo volvió a repuntar, alcanzando los 5000 m3/s y con probabilidad de nuevo incremento. En tanto, el caudal entrante a Yacyretá aumentó de 20.000 m3/s ayer a 21.000 m3/s el jueves, y la descarga aumentó de 20.100 m3/s a 21.000 m3/s. Se mantendrá alto en la próxima semana, con probabilidad de recibir caudales significativos.

El Paraguay no se detiene

Rohrmann explicó que, en Barranqueras, cuando el nivel quebró la barrera de los 6 metros, la reducción se tornó más lenta porque comenzó a desaguar el río Paraguay, que mantiene un caudal muy alto y sostenido. “Como el Paraná está en su cauce, la descarga de una crecida importante del Paraguay lentifica la bajante, que era más sostenida la semana anterior”, analizó.

El río Paraguay registra una crecida importante en toda la cuenca, desde El Pantanal. “Tiene su propia dinámica y por eso demora tanto hasta llegar a la desembocadura con el Paraná, en la Isla del Cerrito”, indicó el experto de la APA. En ese escenario, el avance del Paraguay se encuentra con la crecida del Paraná producida por el río Iguazú.

Para los próximos días se espera el pico crecida del Paraguay, que en Formosa podría alcanzar los 8,50 metros. Mientras, en territorio chaqueño, las áreas más afectadas serán Puerto Bermejo, General Vedia y Las Palmas, principalmente la población rural que mantiene actividades agropecuarias.

De acuerdo con el último informe del INA, el río Paraguay mantiene un “caudal muy alto y sostenido”, un escenario que queda así configurado dado el aporte de las precipitaciones entre 20 mm y 60 mm registradas en la desembocadura esta semana. Según el pronóstico, “se esperan lluvias moderadas a puntualmente fuertes en el sudeste de Paraguay en los próximos días”.

La condición general de la cuenca –según el INA– muestra suelos saturados, con un patrón de lluvias que se vuelve a intensificar. Si bien la cuenca superior ya está definiendo su pico, la onda de crecida aún no terminó de alcanzar su máximo en el tramo paraguayo del río.

En el tramo argentino en Puerto Pilcomayo el nivel subió de 6,96 m a 7,35 m el jueves; y se espera que se estabilice en los 7,45 m alrededor del 5 de julio. En Formosa el nivel subió progresivamente en la semana de 7,95 m a 8,44 m y se espera una lectura de 8,50 m para el 30 de junio. El caudal descargado al Paraná se estima sostenido en unos 9000 m3/s

Fuente: Diario Norte