Paraná: Planificar, el verbo que se impone para pensar la ciudad
Convocados por el Centro de Estudios Inmobiliarios de Entre Ríos, con el auspicio de el Colegio de Corredores y la Fundación Pensar y la adhesión de más de una decena de colegios profesionales, entidades intermedias y entes privados se desplegó ayer en el Centro Comercial e Industrial de la capital provincial una actividad que se propone como un foro que Paraná aplique el concepto de “inteligencia territorial para planificar su desarrollo”.
En la actividad se destacó la presencia de Francisco Ramos Marrau, coordinador general de la gerencia de urbanismo y planificación territorial de la Municipalidad de Concordia.
El salón del Centro Comercial e Industrial de Paraná se llenó de paranaenses para comenzar a desovillar un foro donde desde algunas entidades clave se intenta pensar la ciudad del futuro con un concepto de inteligencia territorial y aplicando herramientas como el “peine verde” y “proyectar entre cuencas”, como una forma de encarar el futuro desde un enfoque sistémico y sustentable.
La presencia del intendente electo, Sergio Varisco, le dio un matiz institucional al encuentro, quien llegó justo para la presentación de Francisco Ramos Marrau, el arquitecto y urbanista que acaba de presentar al Concejo Deliberante de Concordia el plan general de ordenamiento urbano.
La actividad estuvo organizada por el Centro de Estudios de Inmobiliarios de Entre Ríos, dependiente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Entre Ríos, y fue su titular, María Paula Armándola, la responsable de abrir la jornada presentando al panel inicial.
La actividad contó, también con el auspicio de Pensar –la arquitecta Ximena Uranga hizo una alusión en relación con la jornada celebrando su realización- y estuvieron presentes los representantes de los distintos colegios de profesionales y entidades que apoyaron la iniciativa. Adhirieron el Consejo Empresario de Entre Ríos, el Centro Comercial e Industrial de Paraná, la Asociación de Dirigentes de Empresas, la Corporación para el Desarrollo de Paraná, los colegios de Arquitectos, Martilleros, Agrimensores, Escribanos e Ingenieros Civiles; como así también Fundación Mbiguá, Tribu del Salto, Agmer, Secretaria de Educación Ambiental, el Instituto Superior de Corretaje Inmobiliario y graduados de derecho de la UCA, entre otras empresas e individuos.
APERTURA. José María Armándola, titular del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Entre Ríos abrió la actividad y realizó una mención a la incidencia de su actividad en el medio y convocó a las entidades a comprometerse en la definición de las “políticas públicas que la ciudad necesita” de cara al futuro y a los nuevos desafíos que se presentan.
“Necesitamos planificar. Es clave involucrar a las vecinales, a las sociedades intermedias y articular con los organismos para que entre todos podamos ir para adelante en nuestra misión de pensar la ciudad que queremos vivir. Desde el Colegio de Corredores Inmobiliarios estamos convencidos que la ciudad debe ser vista es un núcleo de desarrollo social, sustentable y económico. Hay que hablar con todos los actores (empresarios, productores, comerciantes, dirigentes) para dar respuesta a la necesidad de empleo que hay en la ciudad, que sea genuino viniendo de la parte privada, porque no es ninguna novedad que el Estado como empleador está totalmente colapsado y si se pretende seguir llenándolo de gente es indudable que no dará resultados. Esto no quiere decir que el Estado no deba ser considerado, sino que debemos iniciar un proceso lento, inclusivo, con la participación de todos los miembros de la sociedad para una planificación sustentable”, expresó el dirigente.
Más adelante vinieron las presentaciones del resto de los panelistas y las cuestiones técnicas acerca de cómo cuidar los arroyos, cómo pensar una ciudad distinta en este contexto y cómo asumir el rol de las cuencas como reservorios para vivir mejor.
Encuentro entre ciudades
Antes del comienzo de la actividad, EL DIARIO consultó a Ramos Marrau acerca de los puntos de encuentro que existen entre Concordia y Paraná para que su testimonio pueda ser ponderado en su dimensión entre los presentes –muchos jóvenes- y si se aproxima un nuevo diseño de las ciudades en el futuro cercano.
“El punto de encuentro es la desplanificación. Las barreras naturales no lo son, bien tratadas son parte del territorio, de ese mundo antrópico que tenemos que preservar y cultivar más. Me refiero a la desplanificación en todas las ciudades, a la ciudad dual, que es algo común, hay una ciudad cuidada, integrada, y otra dejada de lado en los bordes. Aunque haya bolsones interiores de pobreza, la antinomia centro-periferia es común en nuestras ciudades.
El otro punto es la integralidad que hay que tener con el resto de la provincia y con las colindantes. El caso de Paraná con Santa Fe es un símil de lo que pasa entre Concordia y Salto, Uruguay. Un río, un puente, una conexión, integración cultural. Nos une mucha agua, mucho río, mucho riachuelo, mucho verde que rodea la ciudad pero poco verde interior”, precisó el profesional que presentó un ameno powerpoint sobre el destino inminente de la capital del citrus.
Dijo el arquitecto que es correcto comenzar a abordar esta problemática, y “todo lo que lleve a tener conciencia del cuerpo direccional de las ciudades y los ciudadanos que hay que planificar me parece superbien. Una de las cuestiones importantes es que los municipios deben tener una Secretaría específica de la planificación, otro elemento de las ciudades en común, y que sus decisiones sean respetadas en el tiempo”, concluyó.
