Por el parate económico en Mendoza peligran 24.000 puestos de trabajo de hotelería y gastronomía
El aislamiento obligatorio hizo bajar las persianas de hoteles, restoranes y bares a fines de marzo y la extensión de la cuarentena y los cuidados para que no se propague el coronavirus hace pensar que esas serán de las últimas actividades en reabrirse.
El aislamiento obligatorio hizo bajar las persianas de hoteles, restoranes y bares a fines de marzo y la extensión de la cuarentena y los cuidados para que no se propague el coronavirus hace pensar que esas serán de las últimas actividades en reabrirse.
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Esa situación pone en jaque a las empresas del sector y con ellas a los 24.000 mendocinos empleados en esas firmas. Mientras el Gobierno Nacional evalúa ayudarlos con Repro, los empresarios locales piden que se establezca la emergencia turística y que se les prorroguen las deudas impositivas.
Este jueves, y a pedido del Gobierno Nacional, la Asociación Empresaria Hotelera, Gastronómica y afines (AEHGA) elevó un informe a la Subsecretaría de Trabajo. Allí debían detallar qué cantidad de empleos estaban en riesgo por el parate económico que sufre el sector. La respuesta remarcó que sólo en las áreas de gastronomía y hotelería de Mendoza se empleaban 24.000 personas y que ante la inactividad productiva, urgía una ayuda económica para poder pagarles los sueldos de abril.
Ese detalle es el que habría elevado el ministro de Tursimo dela Nación, Matías Lammens, al presidente y eso se puso en la mesa para analizar auxiliar al sector con Repro, (Programa de Recuperación Productiva).
«El Repro ayuda pero no soluciona el desastre económico. Hay que pensar que el salario de los empleados suele representar es el 35% de la facturación, por tanto si el gobierno otorga la mita de ese salario, el empresario que hoy tiene facturación $0 debe pagar la otra mitad y además todos los impuestos provinciales y nacionales como si siguiera funcionando normalmente», explicó Fernando Barbera, titular de AHEGA.
El empresario gastronómico asegura que ante el panorama actual varios de sus colegas están evaluando cerrar sus negocios de manera definitiva, porque, sobre todo los más chicos, no tienen espalda económica para sostener los gastos sin ingresos por un mes más.
«No hay forma de que cierre la ecuación, las pérdidas son millonarias y si encima no hay exenciones impositivas lo más probable es que caigamos en mora y eso nos dificulta el acceso al crédito. Por eso necesitamos la emergencia turística, porque nos asfixian los impuestos. Para que se entienda, hoy el Impuesto Inmobiliario de un hotel es igual al sueldo de 3 trabajadores, entonces se hace urgente diseñar un mecanismo de sostenimiento del empleo que contemple la situación impositiva», explicó Barbera.
Cornejo pidió emergencia turística nacional para ayudar a 650.000 trabajadores
El proyecto de ley, del que es coautor el diputado nacional por Mendoza, Alfredo Cornejo, junto a su par de Chubut, Gustavo Menna, pretende que se declare la emergencia para las actividades hotelera, gastronómica y turística hasta el 31 de diciembre de este año. Busca también que se establezca un régimen extraordinario de emergencia laboral, tributaria y financiera par ese sector.
Según la iniciativa, el parate económico que generó el aislamiento afecta hoy a 17.000 hoteles y 5.000 agencias de turismo en el país que, sumados a los locales gastronómicos, suman unos 50.000 establecimientos.
«Es el cuarto sector de la economía más intensivo en mano de obra, responsable de dar empleo a más de 650.000 personas a lo largo y ancho de la Argentina», remarca el proyecto y pide establecer “programas de asistencia crediticia por parte de la banca pública y privada a tasa cero afectados a la cancelación de obligaciones salariales, de proveedores, impositivas y asistencias bancarias preexistentes”, así como “la bonificación de las comisiones bancarias y de tarjetas de crédito; el diferimiento de todas las obligaciones tributarias nacionales hasta el cese del aislamiento social, preventivo y obligatorio, con cancelación posterior en doce cuotas”.
Entre los beneficios que se le daría al sector figura también la exención del pago de Impuesto a las Ganancias por el ejercicio fiscal 2020.
