Por qué Pichetto: un vice sin votos, mucha rosca y la llave para desaforar a CFK
El presidente Mauricio Macri comunicó esta tarde que en las proximas elecciones compartirá binomio presidencial con Miguel Ángel Pichetto, con el cual buscara permanecer en el poder. Ni un referente Pro, ni un radical. Un peronista. ¿Por qué?
11/06/2019 El PaísEl presidente Mauricio Macri comunicó esta tarde que en las proximas elecciones compartirá binomio presidencial con Miguel Ángel Pichetto, con el cual buscara permanecer en el poder. Ni un referente Pro, ni un radical. Un peronista. ¿Por qué?
El presidente Mauricio Macri sorprendió esta tarde con el anuncio de la fórmula con al que el Gobierno buscará permanecer en el poder por cuatro años más y mantener el modelo económico implementado. Después de muchas especulaciones, el mandatario decidió y eligió, pero a ningún integrante de Cambiemos. El elegido por Macri y Marcos Peña es Miguel Ángel Pichetto.
A priori, la decisión no parece volcarse a su capacidad de captar votos. Por ejemplo, las elecciones a Gobernador nunca fueron su fuerte. Fue candidato en 2003 y en 2015, pero nunca logró el apoyo de su gente. La primera vez fue derrotado por el radical Miguel Saiz por un margen de 7 puntos. La segunda frente al candidato independiente Alberto Weretilnek, por casi 20 puntos, y a pesar de la fuerte campaña de instalación que empleó.
La victoria de Mauricio Macri en 2015, pero fundamentalmente el alejamiento de Cristina Fernández de Kirchner del poder, le permitieron manejarse con mayores niveles de autonomía política. Entonces ensayó una construcción peronista “de centro” que no ahorró críticas, aunque facilitó la gobernabilidad, a Cambiemos.
Muestras de eso dan los mensajes que publicaba en las redes sociales desde entonces y hasta este presente macrista. “El gobierno de Mauricio Macri aumentó todo y generó más incertidumbre, endeudamiento, un proceso de empobrecimiento de la clase media y de los trabajadores”, escribió hace apenas tres meses, mientras intentaba darle volumen a Alternativa Federal.
En esos días, una encuesta de Federico González midió su intención de voto en el Conurbano bonaerense: medía 1.1 por ciento. Nada hace pensar que esos niveles de aprobación se hayan disparado en las semanas que siguieron.
Por otro lado, en diciembre expira su mandato en el Senado de la Nación, donde desde el 2002 es jefe del bloque del peronismo. En el recinto, Pichetto acompañó varios de los proyectos legislativos del oficialismo. Uno de los más controvertidos fue el pago voluntario de 9.300 millones de dólares a los fondos buitre. Además apoyó la reforma previsional de 2017 que implicó el 3% de las jubilaciones promedio para 2018 u del 8% para 2019, lo que significó un recorte presupuestario en seguridad social de 72.000 millones de pesos.
Es más, el mismos ministro del Interior, Rogelio Frigerio, destacó que Pichetto “fue fundamental” parta aprobar “más de 200” leyes al Gobierno de Cambiemos.
Supo defender a capa y espada la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, durante el debate por laResolución 125 que imponía a la soja una retención de 63%, se dijo que “apretó” al vicepresidente Julio Cobos para que votara a favor, y hasta lo trató de “judas” por traicionar la coalición gobernante.
Pero a diez años del “conflicto del campo”, Pichetto brindó una entrevista al diario Clarín donde aseguró que para él se trató de “un gran error político, una incomprensión, un problema que era de naturaleza económica que terminó se convirtiendo en político y la primera derrota del gobierno de manera contundente”, y además ahora cree que “podríamos haber encontrado una solución y en la propia Cámara de Diputados, porque también recuerdo que hubo mucha voluntad”.
Fue además, defensor de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual impulsada por el Kirchnerismo. Pichetto, cerró aquel debate donde embistió contra los críticos del proyecto a los que trató de “patéticos”.
Otro de los controvertidos proyectos debatidos fue el Memorándum con Irán. En 2013 cuando se aprobó, dijo: «Nosotros reivindicamos este memorándum y la intención del Gobierno argentino de buscar la solución por la vía pacífica. También la colaboración de un Estado que además indudablemente tiene que prestar colaboración porque de lo contrario la causa va a quedar bloqueada sin fin».
Pichetto es hoy la clave de los desafueros de Cristina Fernández de Kirchner, quien enfrenta actualmente su primer juicio oral. Fue el sostén de los fueron de la ex mandataria y quien posee la llave de su futuro. Es que el presidente del bloque del PJ en el Senado ratificó en diciembre del año pasado, su postura respecto del desafuero de CFK, y sostuvo que «es una posición histórica del Senado no habilitar el desafuero, es una línea que se ha mantenido siempre. Si bien no estaba el planteo del desafuero en un proceso al revés, cuando Carlos Menem quiso ser candidato, no fue habilitado porque tenía condena».
Luego de conocerse la “fórmula del Gobierno”, los votantes de Cambiemos comenzaron a exigir en redes sociales que el ahora candidato a vicepresidente de la Nación vote a favor del desafuero de la expresidenta. Minutos después, renunció a la presidencia del bloque que preside hace 17 años.