Primer encuentro para la unidad opositora
Dirigentes del kirchnerismo, del massismo y del randazzismo confluyeron en un encuentro donde se debatieron temas de coyuntura. Plantearon la necesidad de un frente opositor para enfrentar al macrismo y sus políticas.
09/02/2018 El PaísDirigentes del kirchnerismo, del massismo y del randazzismo confluyeron en un encuentro donde se debatieron temas de coyuntura. Plantearon la necesidad de un frente opositor para enfrentar al macrismo y sus políticas.
“Escuchamos lo que nos dice el pueblo todos los días en la calle: a donde vamos la gente nos pide que nos unamos”, planteó el diputado Daniel Filmus el origen del encuentro de ayer que en poco más de un año y medio, cuando lleguen las elecciones presidenciales, se podrá definir si fue histórico o simplemente anecdótico. Que una tórrida tarde de febrero kirchneristas, randazzistas y massistas se juntaron en un marco entusiasta a debatir propuestas en diferentes mesas temáticas, con la idea de que sea sólo el puntapié inicial y luego se replique en distintos puntos del país sumando protagonistas. Ayer, entre los oradores que pasaron por la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) hubo legisladores, intendentes, sindicalistas, especialistas de diversas temáticas y en el cierre un gobernador, el puntano Alberto Rodríguez Saá. Aunque para otros el interés estuvo en los pasillos, donde se saludaban muchos que hacía tiempo que no se veían. “Nos juntábamos a charlar y nos terminábamos preguntando: ¿por qué estábamos separados?”, contó el ex jefe de gabinete Alberto Fernández el germen de la iniciativa.
El acto empezó con impuntualidad peronista, casi hora y media después de lo anunciado. El auditorio del subsuelo de la universidad desbordaba, casi el doble de su capacidad, y el aire no daba abasto. La mesa de apertura del “Encuentro por la unidad” estuvo a cargo del grupo que viene trabajando en el tema desde diciembre pasado. La bienvenida fue del titular del Suterh y del PJ porteño, Víctor Santa María, en carácter de anfitrión y organizador. “El adversario no está acá dentro, el adversario está afuera”, planteó, una idea que se repetiría en otros expositores. Presentó el evento de ayer como “el inicio de un camino” y advirtió a quienes les tocara protagonizar el proceso que “muchas veces nos van a atacar”.
Aunque resultó inevitable que el acto cerrara con una marcha peronista a viva voz, no hubo bombos ni atriles. En la manera ya popularizada en la última campaña, los expositores se sentaron en sillones, se pararon para hablar micrófono en mano y se fueron presentando unos a los otros. Daniel Arroyo, diputado del Frente Renovador, inició la ronda con una impactante recuento de lo había sucedido en el país apenas en los últimos 40 días en cuanto a tarifas, combustibles, inflación, dólar, reformas y demás, por lo que se hacía imperioso avanzar en una unidad opositora. Y planteó cinco puntos para esa alternativa: que represente a los que “están afuera de todo”, que ese modelo sea “distinto”, que la oposición elabore una agenda común, que la “casa” de esa propuesta “está en el sur” (Mercosur, Unasur, etc.) y que, al fin, esa propuesta tiene que se optimista porque “tenemos razón”.
“Todos los peronistas estamos contentos hoy”, arrancó Alberto Fernández. Enseguida recibió varios comentarios de la platea, deseosa de participar. Eran peronistas y, efectivamente, estaban contentos. “Este encuentro es un llamado de atención de seis compañeros de toda la vida”, explicó, y advirtió “que no nos hagan creer que el 2019 no existe para los peronistas”. Fernández fue el jefe de campaña de Florencio Randazzo en las últimas elecciones y antes del encuentro contó que, días atrás, se reunió con la ex presidenta para resolver sus cuitas. No se hablaban desde hacía una década, desde cuando renunció a la jefatura de gabinete.
“Esta responsabilidad, muy humildemente, queremos llevarla adelante. En estos últimos días hemos visto muchas iniciativas de unidad. Esta se suma a las otras, todas son bienvenidas y nosotros nos sumaremos a las que haya en diferentes ámbitos, sin protagonismos personales”, adelantó Filmus. Fue una preocupación del grupo organizador, Felipe Solá lo subrayó, que ellos no pretendían adueñarse de la “unidad” sino que sólo proponían arrancar la discusión y que apoyarían cualquier iniciativa por el estilo.
Cristina Kirchner y Randazzo dieron un aval explícito a los organizadores, pero había dudas con Sergio Massa. Al respecto, se supo que el bloque del Frente Renovador mantuvo con su referente una extensa reunión el miércoles para debatir qué hacer. Massa era de la idea de “esperar”. Uno de los motivos era, justamente, que la organización del encuentro le resultaba ajena. Pero Solá y Arroyo se mostraron en desa- cuerdo, ya no podían volverse atrás. Varios integrantes del bloque opinaron como ellos. Finalmente, Solá y Arroyo concurrieron, aunque “a título personal” y no como representantes del Frente Renovador.
El planteo del referente del Movimiento Evita, Fernando “Chino” Navarro, fue volver a las “calles” y recuperar el trabajo de la militancia. “Calle, militancia y programa”, sintetizó. Recién después de eso “aparecen los nombres”. Nadie habló de candidaturas pero sobrevoló en todas las exposiciones la idea de una gran PASO que unifique a todos los postulantes del peronismo. El jefe del bloque de diputados del FPV-PJ, Agustín Rossi, resultó el más aplaudido y de discurso más encendido. Ya se ganó el primer reconocimiento por mencionar a Néstor Kirchner –algo que ningún orador había hecho– a propósito de aquello de las verdades relativas y de las convicciones que no se dejan en la puerta. “Yo milito las 24 horas del día para que el 10 de diciembre de 2019 sea el último día que gobierne la derecha en la Argentina”, lanzó. Ante las dudas de si con éste sí o con éste no, zanjó: “el único límite que tenemos para construir la unidad es Cambiemos, se llama Mauricio Macri”.
La marcha surgió desde las plateas. En la primeras filas se acomodaron los invitados especiales, mucho de ellos luego expositores en algunas de las ocho mesas en las que se dividió el encuentro. Estuvieron el presidente del PJ Nacional, José Luis Gioja, y el presidente y vice del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez y Fernando Gray, el ex gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, los diputados Cristina Alvarez Rodríguez y Guillermo Carmona, el ex ministro Carlos Tomada, los ex legisladores Juan Abal Medina y Héctor Recalde, intendentes como Gabriel Katopodis (San Martín), Leo Nardini (Malvinas Argentinas) y Juan Pablo de Jesús (Partido de la Costa), sindicalistas como el diputado Hugo Yasky (CTA) y el ex legislador Tito Nenna (UTE), entre muchos otros. Enseguida todos buscaron la salida del salón. Un poco para buscar aire pero también para saludarse con esos que hacían un rato que no se veían.