Proponen un cambio en las leyes para que los lagos argentinos sean“de dominio público”

El proyecto de ley ingresó a la Cámara de Diputados de La Nación. La medida beneficia e involucra a todas las reservas de agua dulce, especialmente en la Patagonia. Se calcula que su superficie es 40 veces más grande que la Capital Federal.

El proyecto de ley ingresó a la Cámara de Diputados de La Nación. La medida beneficia e involucra a todas las reservas de agua dulce, especialmente en la Patagonia. Se calcula que su superficie es 40 veces más grande que la Capital Federal.

A instancias de la Federación Argentina de Agrimensores (FADA) y con la firma del diputado de Chubut, Santiago Igon, ingresó un proyecto de ley a la Cámara de Diputados de La Nación para eliminar la posibilidad de caracterizar a los grandes lagos de agua dulce – que suman ocho mil km 2 y equivalen a 40 veces la superficie de Capital Federal – como “no navegables”, ya que “esa imprecisa clasificación los dejaría a merced de las leyes del mercado inmobiliario y, con ello, pasibles de sufrir una prescripción adquisitiva de dominio, así como podrían resultar embargados por acreedores o enajenados por el propio Estado”, se informó en un comunicado.

«Entre los 20 o 25 lagos más grandes podemos sumar 8 mil kilómetros cuadrados de superficie con una profundidad promedio de 100 metros estamos hablando de 800 kilómetros cúbicos de agua dulce, son 800 mil billones de litros, que si los dividís por 40 millones de argentinos, te da 20 millones de litros para cada argentino, por los litros que necesit auna persona tenes 80 mil días, 220 años», reseñó el presidente de la FADA, el rionegrino Marcelo Lupiano.

En rigor, se propone una modificación en los artículos 235 y 236 del Código Civil y Comercial de la Nación, normativa de fondo de la República Argentina, que regula las relaciones civiles entre los ciudadanos y es siguiente en importancia luego de la Constitución Nacional y las Constituciones provinciales.

“El objetivo es la creación de una nueva tipificación, que identificará a todos los lagos existentes en el territorio de la República Argentina como permanentes o impermanentes, la cual es una forma precisa, fácil de comprender y objetiva para materializar su clasificación a estos efectos, significando –en consecuencia- sobre los primeros (permanentes) la incorporación plena de sus aguas al dominio público según el artículo 235, decisión que los declara automáticamente como imprescriptibles, inembargables y no enajenables”, dijo.

De esta forma  se coloca “en salvaguarda pública a toda el agua dulce que contienen, reservando su propiedad, uso y goce para todos los ciudadanos argentinos, estableciendo un hito en la defensa del interés general y un posicionamiento firme respecto de las reservas de agua dulce para las futuras generaciones argentinas”.

En caso de prosperar la iniciativa se pondrían a salvo decenas de lagos, sobre todo en la Patagonia, como el Argentino, Viedma, Futalaufquen, Nahuel Huapi, Huechulaufquen, Colhué Huapi, Cardiel, Musters, Strobel, Fontana, Traful, Buenos Aires, San Martín, Fagnano, Pueyrredón, Mascardi, Perito Moreno, Lácar y Aluminé, por mencionar algunos de los más extensos e importantes.

“La Agrimensura argentina, por medio de su Federación y tal como bien se resalta entre los Fundamentos del proyecto en cuestión, viene planteando esta necesidad de cambio en la ley desde hace ocho años con diversas exposiciones y acciones en el Congreso y en distintas legislaturas”, se informó desde la entidad.

“Con el tratamiento y la esperanzada aprobación de este Proyecto, se verían cristalizados aquellos múltiples esfuerzos, y sus preceptos convertidos en Ley de la Nación se convertirían en el fruto de la constancia mantenida al respecto durante todos estos años”, agregó el agrimensor Lupiano.

Para finalizar, la Federación Argentina de Agrimensores declara su “satisfacción” por el deber cumplido e insta a que se apruebe el proyecto presentado por el diputado del Frente de Todos que “defiende intereses comunes a todos los ciudadanos argentinos y constituye un verdadero y cabal acto de soberanía nacional sobre esas estratégicas y extensas reservas de agua dulce”.

Fuente: Bariloche 2000