Quilmes: Martiniano vetó una ordenanza sobre centros culturales sancionada por unanimidad

El intendente de Quilmes, Martiniano Molina, vetó hoy una ordenanza sobre centros culturales sancionada por unanimidad. La iniciativa pretendía regularizarlos y darles una subvención.

El intendente de Quilmes, Martiniano Molina, vetó hoy una ordenanza sobre centros culturales sancionada por unanimidad. La iniciativa pretendía regularizarlos y darles una subvención. Mientras desde el oficialismo dicen que preparan un proyecto “superador”, desde la oposición se aprestan a rechazar el veto.

Hace unas semanas atrás el Concejo Deliberante de Quilmes sancionó por unanimidad una ordenanza impulsada por centros autogestivos que pretendían promover el funcionamiento de los espacios culturales alternativos. A partir de financiamiento local podrían regularizar sus papeles y desarrollar sus actividades de manera autogestiva. También, el texto los obligaba a cumplir con una serie de requisitos, entre infraestructura en buenas condiciones hasta seguridad.

Ahora, tanto los concejales de la oposición como los integrantes de los 36 centros culturales del Colectivo Cultural Quilmeño (CCQ) manifestaron su “preocupación” al respecto. Por eso, mientras desde el Ejecutivo prometieron una nueva normativa “superadora”, desde la oposición se preparan a rechazar el veto. El camino parece complejo, pero varios ediles ya mostraron su predisposición. Para este objetivo, los siete bloques de la oposición, que suman 16 voluntades, se tendrán que poner de acuerdo.

En tanto desde la mesa chica del jefe comunal de Cambiemos argumentaron el veto al afirmar que “la ordenanza tenía grandes falencias desde el punto de vista técnico y desde el funcionamiento”. Aún así, pareciera que eso no les impidió a los ocho ediles del oficialismo acompañar el proyecto. “Se equivocaron, no hubo las consultas necesarias ni la adecuada comunicación para analizar el proyecto”, reconocieron desde el Ejecutivo. Este vacío puso en evidencia las diferencias entre el Legislativo y el Ejecutivo, e incluso dentro del mismo Gobierno, luego de que el secretario de Cultura, Ariel Domene, se mostrara con los integrantes de los centros culturales.

“Vamos a hacer una ordenanza superior para que los centros culturales se puedan financiar y llevar adelante sus actividades, pero también vamos a ponerles reglas para equilibrar sus demandas con la de los vecinos”, explicaron a este medio desde el entorno de Martiniano luego de asegurar que estos espacios llevan a delante “actividades similares” a la de bares y boliches pero “sin regulación”.

Por su parte, los integrantes del CCQ catalogaron la imposición como «un bochorno» y no descartaron una movilización al edificio comunal. «Es una falta de respeto que hagan una nueva ordenanza después de nueve meses de trabajo», se lamentaron.

Fuente: InfoCielo