Río Cuarto Cotreco: lo que empieza mal, termina mal

La empresa llegó en 2011, luego de la crisis de la mixta Gamsur. Juan Manuel Llamosas aseguró en la campaña que la firma no seguiría, pero después dio marcha atrás 

La empresa llegó en 2011, luego de la crisis de la mixta Gamsur. Juan Manuel Llamosas aseguró en la campaña que la firma no seguiría, pero después dio marcha atrás

La llegada de Cotreco a Río Cuarto se produjo en 2011, cuando el entonces intendente Juan Jure le cedió el contrato que el Municipio tenía con la mixta Gamsur por los servicios de recolección de basura y el mantenimiento de las luminarias y de la semaforización. El desembarco de la Compañía de Tratamientos Ecológicos se dio sin planificarse demasiado y ante la inexistencia de una política ambiental clara. Fue una forma de “dejar atrás” una seguidilla de situaciones conflictivas. No obstante, el tiempo demostró que los problemas originales nunca se fueron.

A poco de asumir al frente del Municipio (en 2008), Juan Jure entró en conflicto con los empresarios dueños de parte de las acciones de Gamsur por los mayores costos. Concretamente, no se ponían de acuerdo con respecto a cuánto era el dinero extra que el Estado debía aportar. El diferendo obligó al Tribunal de Cuentas a hacer una auditoría para determinar el monto en cuestión.

En ese marco, los trabajadores de Gamsur, nucleados en el Sindicato Único de Recolectores de Residuos y Barrido de Córdoba (Surrbac), tiraron y quemaron basura frente al Palacio Municipal, en una “acción gremial” casi sin precedentes. Fue una maniobra para ejercer presión en medio de la discusión sobre el futuro de la mixta.

Jure analizó privatizar el 10 por ciento de las acciones municipales, pero la idea no prosperó.

Ya en el 2009, el jefe comunal decidió estatizar la mayoría de las acciones. De esta manera, compró el 97% y afirmó: “Gamsur va a ser el mejor negocio del Municipio en los últimos 25 años”.

Los conflictos con el gremio y los problemas en la prestación de los servicios continuaron. No hubo avances significativos y, poco a poco, el entusiasmo del intendente se fue perdiendo hasta que, en 2010, anunció la venta del 90% de las acciones.

En ese momento apareció Innviron, una empresa de origen estadounidense que estuvo a punto de comprar Gamsur. Sus directivos estuvieron en Río Cuarto presentando un sistema nuevo de tratamiento de los residuos, lo que generó fuertes discusiones y polémicas en el Concejo.

Cuando parecía que todo estaba cerrado, Innviron se negó a hacerse cargo del pasivo que Gamsur tenía con la Afip y la operación se cayó.

Ante el fracaso del traspaso, Jure decidió relanzar la empresa. Se compraron camiones nuevos y, junto a los referentes del Surrbac, se presentó “la nueva” Gamsur.

Las prometidas mejoras nunca llegaron y los conflictos existentes se siguieron profundizando. El intendente analizó distintas alternativas hasta que, en septiembre de 2011, decidió cederle el contrato de Gamsur a Cotreco.

A la Justicia

Fue otra medida polémica. De hecho, desde el peronismo denunciaron penalmente a Juan Jure por abuso de autoridad, al asegurar que la cesión del convenio constituía una ilegalidad.

Los servicios no mejoraron pese a las expresiones de los directivos de Cotreco. En varias oportunidades hubo interrupciones sorpresivas en los recorridos de los camiones y más de una vez la basura quedó desparramada en las calles.

El malestar de la gente con Cotreco fue tal que durante la campaña del 2016 por la intendencia todos los candidatos prometieron la salida de la firma.

“Conmigo Cotreco se va”, señaló de manera tajante Juan Manuel Llamosas. No obstante, al asumir como jefe comunal le prorrogó el contrato.

Acto seguido, en el transcurso de 2017, hizo un llamado a licitación por separado. Por un lado concesionó el servicio de recolección de residuos y su tratamiento final y, por el otro, el mantenimiento de las luminarias y la semaforización.

Cotreco y Lusa compraron los pliegos para la recolección de residuos y la planta de tratamiento. En tanto, Eva y El Gaucho adquirieron únicamente las bases y condiciones para la disposición final. Sin embargo, la Compañía de Tratamientos Ecológicos fue la única que presentó una oferta concreta.

De esta forma, Llamosas procedió a adjudicar el servicio a Cotreco, sepultando definitivamente su promesa de “echar” de la ciudad a la polémica empresa.

Si bien el intendente diferenció la nueva etapa de la anterior, en los hechos Cotreco siguió siendo la misma de siempre e incluso peor.

La prestación de los servicios continúo sin mejorar y se fue encareciendo con el paso de los meses. Actualmente cobra un canon mensual de $ 39 millones y no avanzó en la construcción de la planta de reciclado, pese a que se le pagó para que eso sucediera.

Aunque el Municipio ha cumplido con su parte, a lo largo del 2018 la empresa incrementó considerablemente su pasivo al emitir miles de cheques sin fondos. En el presente, tiene un sinnúmero de embargos. Su crítica situación económica y financiera la llevó a pedir la apertura de un concurso preventivo.

De acuerdo al convenio, la Municipalidad no puede continuar con el contrato en estas condiciones, por lo que cada vez son más los que aseguran que el final de la era Cotreco es sólo cuestión de días.

Frases históricas

Juan Jure (intendente 2008-2016)

“Gamsur va a ser el mejor negocio del Municipio en los últimos 25 años”. Fue en julio de 2009, tras comprar el 97% de las acciones de la empresa mixta. Al año siguiente anunció la venta de la firma. No obstante, quedó en la nada. En 2011 le traspasó el contrato a Cotreco, abriéndole las puertas de la ciudad.

Juan Manuel Llamosas (intendente 2016-2020)

“Conmigo, Cotreco se va”. Lo dijo en más de una oportunidad durante la campaña por la intendencia. Una vez que asumió, prorrogó el contrato y convocó a una licitación que confirmó la continuidad de la Compañía de Tratamientos Ecológicos.

Fuente: Puntal