San Francisco: La disparidad de los alquileres atenta contra los comercios del centro
Las diferencias en los precios complican la situación de los inquilinos de locales que representa el 20% de gastos fijos. Los comerciantes temen que se convierta en una zona bancaria o de oficina
Las diferencias en los precios complican la situación de los inquilinos de locales que representa el 20% de gastos fijos. Los comerciantes temen que se convierta en una zona bancaria o de oficina por eso piden la extensión del «centro» hacia otras calles.
El centro de la ciudad demuestra el golpe de la cuarentena que vivimos hace un año atrás. La pandemia de coronavirus afectó al comercio de nuestra ciudad y dejó gran cantidad de locales vacíos en el bulevar 25 Mayo como en sus calles adyacentes.
Cada vez son más los comerciantes que optan por abrir sus negocios e instalarse en sus casas en diferentes barrios debido a los altos costos y requisitos que exigen en la zona céntrica.
La disparidad de precio de los alquileres y los impuestos como gastos fijos, alertan al comercio que está trabajando 20% menos que antes de la pandemia.
Los comerciantes que tienen los negocios en esta zona temen que el centro sea solo un sector de oficinas o bancario que son los rubros que pueden pagar los altos costos de «estar» en el centro. En este sentido, invitan a ampliar el sector céntrico para que haya más competencia inmobiliaria.
Según Jorge Gianotti, presidente de Vamos al Centro, «estamos trabajando un 20% de lo que facturábamos antes de la pandemia mientras que el alquiler representa entre un 15% y un 20% de los gastos fijos que tenemos mes a mes».
Respecto a la situación de los alquileres, el comerciante destacó que «hay muchos locales vacíos en el centro y es notorio en las calles que conectan con 25 de Mayo como es el caso de Mitre, Alberdi, España y otras».
«Los comerciantes sobre 25 de Mayo comentan el alto costo del alquiler, que desde mi punto de vista, es debido a la posibilidad que tienen de pagar los grandes como los bancos, cadenas de electrodomésticos, supermercados o empresas de seguros, por ejemplo. Eso desconfigura el verdadero precio de los alquileres. El centro se está conformando en un lugar bancario o de oficinas más que de negocios de venta minorista», afirmó el empresario.
Para Gianotti, sería válido que se valoricen otras arterias cercanas a 25 de Mayo y se descentralice la actividad comercial. «Hay muchas calles muy bonitas como 9 de Julio y no logra desarrollarse como debería. Si se ampliara la mirada, habría más ofertas de locales y los precios de los alquileres serían más razonables».
La preocupación del Ces
La situación no es nueva. Desde el Centro Empresarial y de Servicios (Ces) alertaron en noviembre del año pasado que el alquiler era una de las mayores preocupaciones para los pequeños comerciantes.
En el escrito presentado, el Ces argumentó que «uno de los aspectos que se consideraron dado a la gran preocupación generada entre los comerciantes que alquilan locales comerciales fue – precisamente – el costo de dichos alquileres, máxime si consideramos que aproximadamente dos tercios de los socios al CES alquilan el espacio de trabajo donde desarrollan sus funciones».
«En un cuadro de situación tan complejo donde la realidad de las PyMES es muy delicado y preocupante, donde muchas se encuentran en el dilema de cómo preservar los puestos de trabajo de sus empleados, cómo pagar a sus proveedores, hacer frente al pago impuestos y servicios, obligaciones tributarias, etc. etc. solicitamos nuevamente y sugerimos – como institución gremial empresaria – a los dueños de locales comerciales y comerciantes la empatía necesaria en estos difíciles momentos, (no sólo por la situación generada por la cuarentena sino también por la económica que afecta a todos los estamentos de la sociedad), a sentarse a negociar los montos de los alquileres y tratar de buscar alternativas que favorezcan y sean equitativas para ambas partes (locatario y locador», publicaron.
En este sentido, la Coordinadora de Comercios del CES, María Florencia Vázquez, «Hay un gran descontento por el aumento de los alquileres, si bien algunos pocos pudieron negociar con el locatario la gran mayoría tuvo que afrontar este inconveniente».
«Tenemos conocimiento de que algunos comerciantes dejaron el sector para mudarse a los barrios, achicando costos, con el fin de «sobrevivir » a la pandemia», finalizó.
Disparidad
Respecto a los costos de los locales, las inmobiliarias consultadas arrojaron que los precios van desde los $7000 a los $70.000 dependiendo de la ubicación, tamaño del local y vidriera y el estado del mismo».
«La disparidad se debe a que cada propietario pone el precio que le sirve, siendo así muchos locales se desocupan porque el comercio está difícil. Se observa que los locales no reciben la mercadería que necesitan pero lo más grave es que hay locales de la misma medida donde uno paga $30.000 y el otro $ 50.000».
«Todo depende de una negociación entre propietario e inquilino, acorde a las necesidades de cada uno»,
Además del alquiler, los comercios pagan servicios de agua, luz y gas; y en algunos locales se le agregan los dos impuestos municipal y provincial. Sobre estos dos impuestos en particular, hay disparidades en las formas de pago, pero las empresas de alquiler aseguran que el municipal suele ser muy elevado.
Para las inmobiliarias, la situación es bastante difícil para los comerciantes y los alquileres van a seguir aumentando pero el precio está acorde a lo que es el local pero en la mayoría de los casos los propietarios tienen consideración y bajan un poco para poder seguir alquilando, ya que si se desocupan es difícil encontrar un nuevo inquilino.
Respecto a la nueva ley de alquileres, los entrevistados aseguraron que «no afecta tanto al comercio porque no se define un índice específico para el ajuste de precio, por lo cual el propietario e inquilino pueden convenir el ajuste que le parezca adecuado y llegar a un acuerdo, así como en el pago de las cargas y contribuciones en el cual las partes pueden negociar libremente».
Sin embargo, «el monto de los alquileres no va a dar un salto tan grande como en la vivienda familiar la cual si se ve afectada en muchos casos por la nueva ley».
