Santa Fe: Sobre el agua y bajo tierra crece la obra del Acueducto Norte
En su primera etapa, va a proveer de agua potable (de mejor calidad que la actual) a Santo Tomé, Sauce Viejo y Desvío Arijón. Y en la próxima -que requiere un préstamo que discute la Legislatura- a Rafaela y Sunchales.
Cuando los nadadores llegan a la “Cortada de los Suspiros”, a la altura de Desvío Arijón, se dice que la Santa Fe-Coronda ha alcanzado algo menos de la mitad de su trayecto.
Curiosamente, la obra que crece muy cerca de ese lugar está, también, bastante cerca de completar la mitad del total del tiempo previsto por su contrato. (Aunque no de su presupuesto de unos 300 millones).
Donde el Coronda corre con fuerza -y hasta hace poco había un bosquecito de eucaliptus-, unos 500 metros aguas arriba de esa referencia que es tanto amatoria como deportiva (y que pierde todo su romanticismo el día del maratón), estará en poco tiempo la toma que alimentará de agua cruda a la planta potabilizadora, que luego conducirá el Acueducto Norte 1.
Nuevos vecinos
A la toma de agua se llega por la Ruta 11, a la altura de la parada del ómnibus, que está identificada con un letrero que dice barrio Río Grande. Un camino de tierra conduce directo a una bifurcación de caminos: la mítica cortada está debidamente identificada y -en cambio- el que conduce a la obra, no.
Los tres nuevos vecinos de Desvío Arijón (la toma, la planta y la cañería) van a cambiar la vida de esa localidad, de Sauce Viejo y de la ciudad de Santo Tomé, cuando termine el contrato en ejecución. Y de otras urbes más distantes, como Rafaela y Sunchales, cuando se haga la segunda etapa del programa previsto por el Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente (que requerirá de un préstamo internacional).
Los trabajos se han completado en un 25% del total del contrato. Pero en obras públicas, como en las competencias deportivas, se sabe que los primeros pasos son decisivos y que cuando se alcanza cierto ritmo en la ejecución, o en las brazadas, la sistematización y la correntada aceleran los tiempos de las obras, sobre todo en saneamiento.
En la toma se hicieron apenas 5 de los 28 pilotes que llevará esa suerte de muelle que se internará en el Coronda. Pero hacerlo requirió antes de remover a un eucaliptus gigante -y seguramente centenario- y luego preparar el terreno con un movimiento de 1.550 metros cúbicos de suelo. Una vez que el trabajo se repite se gana tiempo: la estimación es que para julio estará lista la obra civil.
Lo mismo ocurre en el establecimiento potabilizador. Se ha completado la cisterna que guardará 12 millones de litros de agua ya lista para consumo humano y ahora se repite la construcción de otros recintos, las salas de filtrado (cuya estructura de hierro atan por estos días parte de los 60 trabajadores de la obra) y la de floculación (que ya fue hormigonada y sigue fraguando, con el encofrado).
Se ha terminado la cisterna de reserva al sur de Santo Tomé, falta la que estará en la zona norte, la de Sauce Viejo (con la previsión de dos acometidas más para el futuro), y de la cañería hasta aquella ciudad ya se ha completado el 63% del total.
Visita oficial
Ayer, para ver cómo avanzan las obras -y como para preparar el terreno del debate legislativo para la autorización de un préstamo internacional- visitaron Desvío Arijón el vicegobernador Jorge Henn (en representación del gobernador Antonio Bonfatti); el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio; el senador por el departamento La Capital, Hugo Marcucci; el intendente de Sauce Viejo, Andrés Vallone, y el concejal de la ciudad de Santa Fe, Carlos Suárez.
La intención de unos y otros ha sido tanto la de ver cómo marchan los trabajos, así como reforzar la importancia de que se den los pasos necesarios para poder contraer un préstamo, y así licitar la segunda etapa, que llevará agua potable a una zona endémica de arsénico (en el noroeste santafesino).
La toma, en fecha patria
“Entonces, al locro del 25 de Mayo lo comemos acá para ver terminada la obra civil de la toma de agua”, dijo Antonio Ciancio a los ingenieros que conducen la obra del Acueducto Norte I – Desvío Arijón. Pero el más prudente de ellos, tal vez pensando en las complejidades de improvisar un almuerzo al aire libre, al lado del río Coronda, en medio del obrador, le retrucó: “Ministro, mejor unas empanadas… y el 9 de Julio”.
Por supuesto que las fechas importaban tanto como el menú. Entre bromas y precisiones de los inspectores de obras del Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente (y algunas respuestas de los representantes de la contratista), ayer la delegación oficial que visitó los trabajos en marcha dibujó algunos cálculos sobre cuánto le falta a la estructura, que se internará unos 80 metros en el río Coronda, para llegar a un punto donde conviene extraer agua cruda, porque la corriente es constante y hay menos material en flotación.
La toma tendrá la forma de un muelle, sostenido por 14 pilas. Cada una se apoyará en pilotes de 25 metros de profundidad y será rematada con un cabezal rectangular, similar al que usan los puentes.
La estructura es una de las tres principales que componen el conjunto que dará agua potable a las redes existentes en Santo Tomé y Sauce Viejo (donde está prevista una ampliación) así como a las de Desvío Arijón.
Se estima que antes de fines de 2015, el total de los trabajos (la obra civil actual y la provisión de equipos electromecánicos) estará terminado.
El Acueducto Norte 1 fue diseñado para dar agua potable -por 30 años- a esas ciudades, así como a otras del centro-oeste, entre las que se encuentra Rafaela y Sunchales, donde la presencia de arsénico en las napas subterráneas complica las posibilidades de abastecimiento con una fuente local.
Para la toma ya se hincaron 5 de los 28 pilotes. Los que van en tierra firme (a la orilla del río) son de 90 cm de diámetro y los que soportarán el agua del Coronda, de un metro.
Henn: más fondos para seguir al oeste
El vicegobernador, Jorge Henn, y el ministro de Aguas y Servicios Públicos, Antonio Ciancio, recorrieron el avance de las obras del Acueducto Norte I. Henn manifestó que “finalizar las obras de acueductos es vital para todos los santafesinos.
En la Legislatura se encuentra en tratamiento un pedido de autorización de endeudamiento por 330 mil pesos para realización de obras de provisión de agua para toda la provincia, entre los que se contempla el acueducto de Desvío Arijón que en su segunda etapa abarca las localidades de Matilde, Sa Pereyra, Angélica, Susana, Sunchales, Rafaela y San Carlos, beneficiando a 330 mil personas aproximadamente. Por esto es fundamental su sanción definitiva”. Además, explicó que el mensaje del Poder Ejecutivo establece obras para seguridad por 284 millones de pesos, siendo un total de aproximadamente 634 millones de pesos.
Asimismo agregó: “El primer tramo estará finalizado en 2015, pero desde el ministerio se enfatiza en la necesidad de continuar a ritmo sostenido la construcción del acueducto para terminarlo en su totalidad y llegar hasta el departamento Castellanos. No podemos perder de vista la relevancia que reviste esta obra. Todos sabemos la importancia que tiene la provisión del agua para las distintas poblaciones, ya que no sólo se mejora la calidad de vida de los ciudadanos sino que también se optimizan condiciones de producción”, finalizó.
