Sierras Chicas, Córdoba: municipios piden un adelanto de coparticipación
Los intendentes de las localidades afectadas por el aluvión y las inundaciones pidieron una ayuda a la Provincia.
Los intendentes de las principales localidades de las Sierras Chicas que se vieron afectados por el aluvión del 15 de febrero y por la posterior inundación decidieron solicitar al Gobierno de Córdoba el adelanto de un mínimo de 1 millón de pesos por localidad que luego sería abonado por cada intendencia con sendos descuentos en la coparticipación que reciben menusalmente de la Provincia.
Aunque el gobernador José Manuel de la Sota y sus principales ministros explicaron el lunes por la tarde a los intendentes de las Sierras Chicas que la Provincia iniciará de inmediato la reparación de las viviendas dañadas por este fenómeno climatológico y se profundizará la tarea de limpieza del río Saldán, los jefes comunales no quedaron conformes y exigen algún tipo de compensación por los millonarios gastos que han tenido en combustible, insumos y materiales en los últimos dos meses.
Por esta razón, los intendentes de Unquillo (Germán Jalil), Villa Allende (Héctor Colombo), Mendiolaza (Daniel Salibi), Río Ceballos (Sergio Spicogna), La Granja (Daniel Ambrosich), Salsipuedes (Sergio Cornejo), Agua de Oro (Carlos Belli) y Villa Cerro Azul (Andrés Data) decidieron en conjunto pedir al Ministerio de Gobierno que adelante entre 1 y 2 millones de pesos a cada administración para poder compensar los millonarios gastos que han tenido y siguen teniendo como consecuencia del desastre sufrido en febrero.
Esta suma no sería en carácter de subsidio sino que cada gobierno municipal asumiría el compromiso de devolverla sin intereses en los meses que decida la Provincia.
Al fundamentar esta solicitud, los intendentes recuerdan que han tenido que afrontar desde el 15 de febrero en adelante numerosos gastos que han puesto en rojo las finanzas comunales.
El más importante de ellos es el de combustible para las diferentes maquinarias que han trabajado o trabajan en la limpieza de los sectores anegados y de las calles destruidas. Hubo que reparar además mobiliario urbano y ayudar con alimento a centenares de familias.
Aunque la Provincia aportó máquinas para trabajos viales y la limpieza de ríos y arroyos, el gasto de combustible es afrontado por cada intendente y es muy caro.
Además, se tuvo que brindar alimentación durante varias jornadas a las familias evacuadas y a los efectivos del Ejército y de Gendarmería que colaboraron en las primeras semanas después del desastre climatológico.
Los intendentes que responden a fuerzas políticas tan diferentes como el Frente Cívico, la Unión Cívica Radical y el Partido Justicialista confían que el Ministerio de Gobierno avalará la solicitud. El monto a entregar en cada caso estará sujeto a la disponibilidad de fondos de la Provincia.
Como Jesús María no integra este lote de municipios, ingresaría en otro plan especial de ayuda.
