Sur de Santa Fe: Las aguas bajan en la región, pero aún preocupa la situación hídrica

Historia repetida. Ayer muchos campos estaban cubiertos por las aguas tanto en Chabás, Casilda como en San Jerónimo, Carcarañá, Funes y Roldán.

Historia repetida. Ayer muchos campos estaban cubiertos por las aguas tanto en Chabás, Casilda como en San Jerónimo, Carcarañá, Funes y Roldán.

Una situación que parece calcada de inundaciones anteriores que también fueron causadas por las intensas lluvias. Casilda, Sanford y Chabás, algunas de las poblaciones más damnificadas.

El lento descenso de las aguas trajo alivio, pero la situación hídrica continuaba siendo preocupante ayer en varias localidades del sur santafesino afectadas por las copiosas lluvias que se registraron en la región desde el sábado.

Anegamientos en zonas urbanas, canales desbordados o al límite de su capacidad, campos convertidos en verdaderos ríos, y evacuados fueron las postales que dejo el furibundo temporal.

Los canales que drenan hacia Roldán y Funes estuvieron al límite y la ruta 9, a la altura de Carcarañá, anoche estaba cortada (ver aparte).

Casilda, Sanford y Chabás fueron algunas de las poblaciones más perjudicadas por el fenómeno climático, aunque el panorama comenzaba a mejorar y se esperaba que, de no surgir imprevistos, la situación se normalizara hoy.

Lo sucedido fue casi calcado a lo ocurrido hace poco tiempo, también a causa de las intensas lluvias, en esta misma zona del departamento Caseros y que movilizó a las autoridades locales para reclamar a la provincia la puesta en marcha de obras hidráulicas que recién se ejecutarían una vez culminados los estudios técnicos.

Claro que mientras, urge la necesidad de que se hagan, tal como fue reclamado aún sin éxito, la limpieza de canales para mejorar el escurrimiento hídrico y prevenir o paliar más inconvenientes.

En tal sentido trascendió que el área de Hidráulica provincial enviaría en breve a Casilda una retroexcavadora para efectuar tareas de saneamiento en el canal Candelaria que atraviesa la ciudad y que desbordó en algunos sectores tras la crecida de su cauce, cuyo nivel recién comenzó a bajar a media mañana de ayer.

El impacto de los más de 180 milímetros caídos en esta ciudad se sintió con mayor virulencia la zona periférica de Nueva Roma donde fueron evacuadas 23 personas entre niños y adultos que hasta ayer permanecían alojadas en la sede de la vecinal barrial, por lo que la comunidad colaboró con la donación de alimentos y ropa.

«Debido a la cantidad de cosas recibidas tuvimos que pedirle a la población que deje de hacer donaciones, lo cual revela la gran solidaridad de la gente», explicó a LaCapital la titular de la institución vecinalista, Griselda Lescano.

Pese a los inconvenientes generados por el temporal «la situación está controlada», aseguró el asesor de la junta local de Defensa Civil, Edgardo Bartomioli, para luego indicar que la crecida del canal Candelaria «está bajando y eso resulta tranquilizador ya que era la principal preocupación».

Según datos preliminares unas 50 familias resultaron damnificadas al ingresar agua en sus viviendas, aunque un alto porcentaje decidió autoevacuarse trasladándose a casas de familiares o amigos.

Por la crítica situación desembarcó en Casilda y la zona el titular de Protección Civil de la provincia, Marcos Escajadillo, a fin de colaborar con las tareas de monitoreo y emergencias.

En Chabás.El problema fue aún más preocupante en Chabás, ya que casi el 70 por ciento del casco urbano quedó anegado, lo que obligó a algunas familias a dejar sus domicilios hasta que baje el agua, lo que comenzó a suceder ayer aunque lentamente.

En Sanford también hubo inconvenientes, aunque de menor magnitud, en un sector del casco urbano y la mayor preocupación estaba centrada en el desborde de una canal rural que obligó a colocar barreras de arena para frenar la circulación de agua hacia el poblado. «El problema es crítico, pero estamos haciendo lo posible con el acompañamiento de la provincia para resolverlos o que al menos no se agrave», dijo el mandatario local, Julián Gironelli.

La diputada provincial y vecina de Chabás, Miriam Cinalli, pidió a la provincia una «urgente» asistencia de fondos para ayudar a los municipios y comunas afectadas por el temporal. La legisladora además aclaró que «es imperante la necesidad de que se realice la limpieza de canales de la cuenca del arroyo Candelaria, la cual abarca los canales Candelaria, Sanford, Arequito y Buena Moza y la construcción de aliviadores del arroyo Saladillo en Chabás y del Carcarañá en Arequito». Asimismo pidió, en el marco del mismo proyecto, que se declare la emergencia hídrica y social y/o zona de desastre en San José de la Esquina, Arequito, Los Molinos, Sanford, Villada, Chabás y Casilda.

«Este es el tercer fenómeno que sufrimos en cinco meses con lluvias cercanas o superiores a las 150 milímetros y aún así desde la provincia no se ejecutan las obras», remarcó la legisladora.

Si bien el tránsito fue interrumpido en distintos corredores viales de la zona, la situación se fue normalizando pero aún estaba restringida la circulación sobre la ruta nacional 33, entre Zavalla y Pujato, debido a la presencia de agua en la calzada.

Desborde del Saladillo. Por la gran cantidad de agua que cayó y la que viene bajando de las zonas vecinas se desbordó el arroyo Saladillo en el barrio Las Flores de Rosario y produjo el anegamiento de algunos sectores.

Al cierre de la edición en la zona más baja del barrio se trabajaba con bombas para retirar el agua. Desde Promoción Social del municipio rosarino evaluaban si evacuaban a las personas afectadas. Se consideraba que el arroyo estaba en el pico, por lo que se espera que comenzaría a bajar.

En Villa G. Gálvez fueron convocados los bomberos por temor al desborde del arroyo en ese sector.

Defensa Civil monitorea la situación del arroyo Ludueña, pero aún no reviste peligro inminente.

Puente cortado. Ayer a última hora continuaba cortada la ruta 9 a la altura del puente del Carcarañá, el que nuevamente resultó desbordado por el río. El tránsito es desviado por autopista Rosario-Córdoba. Previamente, se había interrumpido entre Carcarañá y Correa porque el agua acumulada en los campos pasaba por sobre la calzada. También, entre Roldán y San Jerónimo Sud se dio una situación similar, pero se pudo seguir circulando con mucha precaución.

En cuanto a medidas de prevención, unos 35 pobladores del Barrio Formoseño de Carcarañá fueron ubicados en el parque Sarmiento.

También en Totoras se registraron los casos de 15 familias residentes en los parajes Colonia Medici y barrio Cicarelli, ubicados entre las rutas 34 y 178, que quedaron aisladas. Por estos casos las autoridades efectuaron un monitoreo a nivel local y provincial en caso de ser necesaria la asistencia, aunque por el momento el agua va descendiendo paulatinamente.

Por otra parte, 120 personas debieron ser evacuadas en la ciudad de Arroyo Seco y fueron alojadas en distintos centros dispuestos por el municipio.

Fuente: La Capital. Rosario