Tucumán volvió a liderar el ranking de empleo “en negro”
En el Gran San Miguel se registró un 45,3% de informalidad laboral en el inicio del año El nivel provincial fue el más alto del país en el primer trimestre, al igual que en 2013, cuando se observó un 45,5%
El empleo “en negro” sigue golpeando a Tucumán. Es que en la provincia volvió a registrarse el índice más alto de trabajo no declarado del país en el primer trimestre del año. La informalidad afectó a un 45,3% de la masa de asalariados, que llegó a los 247.640 trabajadores.
La marginalidad laboral se ubicó 0,2 punto porcentual por debajo del dato del año pasado, cuando fue de 45,5%. Es decir, en la comparación interanual, el empleo no registrado casi no tuvo variación. Esto, a su vez, demostró que la informalidad continuó siendo un problema estructural en el territorio tucumano.
El empleo no registrado implica la falta de cobertura de una obra social y dificultades para acceder a una jubilación.
En el primer trimestre, la tasa del Gran Tucumán-Tafí Viejo superó a la de Río Cuarto, en Córdoba, que ha sido de un 44,8% de trabajadores “en negro”, seguido por Salta, con un 44,2%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec)
En la Argentina, un tercio de la fuerza laboral no está registrada y la calidad del empleo empeoró entre enero y marzo de 2014, comparado con igual período de 2013. El Indec indicó que en el primer trimestre, un 32,8% de los trabajadores no estuvo inscripto, lo que reflejó una pérdida de calidad laboral, dado que un año atrás fue de un 32%.
El último dato oficial se registró en medio de un deterioro de la actividad económica, con una marcada desaceleración en su ritmo de crecimiento.
Por otra parte, pese a los distintos planes anunciados para combatir el trabajo “en negro”, la tercera parte de los trabajadores no trabaja en condición regular desde hace al menos siete años, según consignó la agencia de noticias DyN.
También se repitió como norma que las peores condiciones se encuentran en el norte del país.
De acuerdo con las cifras oficiales, sobre una población económicamente activa de 18 millones de personas y una tasa de desocupación de 7,1%, cerca de 4,2 millones de trabajadores tuvo un empleo “en negro”.
Según el organismo de estadísticas oficiales, la situación más precaria se observó en el noroeste, justamente, donde un 40,6% de los trabajadores no estuvo inscripto. Luego apareció la región noreste, con un 35,1%, y Cuyo, con un 35%. En el Gran Buenos Aires, un 32,5% de los empleados no estuvo anotado y en la zona pampeana, el porcentaje se ubicó en un 31,6%.
La mejor situación se observó en la región patagónica, donde un 20,1% de los empleados trabajó de manera informal hasta ese período.
Comparando con el primer trimestre de 2013, se registró que el deterioro de la calidad del empleo se notó con mayor fuerza en los aglomerados de más de 500.000 habitantes y en especial en el Gran Buenos Aires.
