Un estudio confirmó que la pobreza en Argentina subió al 43% en la primera mitad de este año

En 2022, la pobreza había terminado en el 40%, (frente al 39% del Indec), y ahora según un estudio realizado por la Universidad Di Tella ascendió al 43%.

En 2022, la pobreza había terminado en el 40%, (frente al 39% del Indec), y ahora según un estudio realizado por la Universidad Di Tella ascendió al 43%.

La inflación no para de crecer en Argentina, y la tasa de pobreza de la primera parte del año ascendió a un 43% de la población, la tasa más alta desde 2004, según un estudio de la Universidad Di Tella.

En ese marco, el experto en estadísticas sociales, Martín González Rozada, estimó “una tasa de pobreza de 43.4% para el semestre diciembre 2022-mayo 2023 con un intervalo del 95% de confianza entre [41.8%, 44.9%]”.

Asimismo, indicó: “La incidencia proyectada es un promedio ponderado de una tasa de pobreza estimada en 41.2% para diciembre de 2022, 42.3% para el primer trimestre de 2023 y 46.0% para el bimestre abril-mayo de 2023″.

Según el econometrista, “esta proyección sugiere que el 43.4% de las personas viven en hogares urbanos pobres. La población urbana capturada por la EPH en el semestre de referencia se estimó en alrededor de 29.1 millones de personas lo que implica que alrededor de 12.6 millones viven en hogares urbanos pobres”.

De este modo, en el segundo semestre del 2022, Di Tella había estimado un nivel de pobreza del 40,2%, contra el 39,2% que informó el Indec para el mismo período.

Cabe remarcar que, en la hiperinflación de Raúl Alfonsín la pobreza había llegado al 48%, bajó al 16% en 1994 y subió al 26% en 1999, según la serie histórica oficial reconstruida por Leopoldo Tornarolli.

Durante el gobierno de Alberto Fernández, en 2020 –con la pandemia- llegó al 42% en el segundo semestre, descendió en 2021 al 40,6% en el primer semestre y al 37,3% en el segundo; y en 2022 fue del 36,5% y del 39,2%, respectivamente.

Por otro lado, para la UCA, en la segunda mitad del año pasado la tasa de pobreza fue del 43,1%, “afectando con mayor fuerza a la población más vulnerable. Sin embargo, los nuevos pobres pre y post-pandemia provienen de las clases medias tradicionales no profesionales”.

FUente: Cordillerano