Una parroquia de La Plata tiene 2 mil familias en lista de espera “para comer”
Así lo manifestó el director de Cáritas en la capital bonaerense. Asegura que la falta de alimentos en algunos barrios de la periferia es “desesperante”. Hay comités de crisis evaluando las posibilidades de asistencia
13/05/2020 MUNICIPIOSAsí lo manifestó el director de Cáritas en la capital bonaerense. Asegura que la falta de alimentos en algunos barrios de la periferia es “desesperante”. Hay comités de crisis evaluando las posibilidades de asistencia
Con el país en vilo por la pandemia de coronavirus, los vecinos de los barrios más vulnerados de La Plata no solo permanecen en jaque por la problemática sanitaria, sino también por la falta de alimentos: según informó Cáritas, en solo una de las parroquias de la periferia ya existe una lista con 2 mil familias que esperan “para comer”.
Se trata de la capilla San Joselito, ubicada en las inmediaciones de 531 y 156, donde el Padre Isidro recibió una cantidad de pedidos imposible de cubrir por la entidad solidaria. “No le voy a poder dar para 2 mil, porque tenemos 77 parroquias, además de las capillas y los comedores; al menos a Cáritas, la comida no nos alcanza”, sostuvo Cristian Gonzalvez, el director de la institución en la capital bonaernese.
Durante una comunicación telefónica en “Me levanté cruzado”, con Martín Strilinsky, por LA CIELO 103.5 FM, el referente aseguró que la necesidad alimentaria aumentó de forma alarmante en un mes en el mismo barrio: “Cuando llegaron las 500 cajas de Seamos Uno habían 500 personas más esperando, que se quedaron sin nada”.
Aunque con matices, la problemática se extiende en otras áreas de los alrededores de La Plata, como Romero, Los Hornos, Villa Elvira, Villa Montoro y El Carmen (Berisso). Según Gonzalvez, algunos casos son “desesperantes” y otros están más organizados, con los comités de crisis que trabajan en distintas zonas desde abril.
“Tendrían que estar desbordando de alimentos las parroquias, los comedores, las organizaciones, pero es todo lo contrario, no se puede creer”, se lamentó el sacerdote, y explicó que la escacés también está vinculada a los cambios de gestión que generan trabas burocráticas. “En Cáritas hace más de un mes y medio que no recibimos alimento”, aseguró.