Vidal se gastó más de 80 mil millones de pesos para salvar a Macri en el “martes negro”

Son fondos equivalentes a la recaudación de Ingresos Brutos e Impuesto Automotor en lo que va del año. Y se utilizaron para sostener la política económica de Mauricio Macri, durante la crisis del mes pasado.

Son fondos equivalentes a la recaudación de Ingresos Brutos e Impuesto Automotor en lo que va del año. Y se utilizaron para sostener la política económica de Mauricio Macri, durante la crisis del mes pasado.

En un contexto en el que los intendentes reclaman fondos, la negociación con los docentes está al borde del estallido y ya no se ven obras en el ancho territorio provincial, el Estado bonaerense desembolsó unos 82 mil millones de pesos para adquirir Lebacs, Letes y llevar a cabo otras inversiones financieras en las semanas previas a la corrida del dólar que se conoció como “martes negro”.

Vidal y su equipo, con el ministro Hernán Lacunza a la cabeza, salieron al rescate de la administración Macri en el medio de una tormenta que combinó una importante escalada del dólar, combinada con el vencimiento de unos 680 mil millones de pesos en Lebacs, que generó pánico y proyectó la sombra de 2001 sobre el país.

Fueron, en total, 6.800 millones de pesos en plazos fijos; 56 mil millones en LEBACS, 18 mil millones en LETES y 800 millones en otras inversiones, que se efectuaron entre el 4 y el 16 de mayo de este año, justo antes del “martes negro” que desembocó en las gestiones de Macri y Dujovne ante el FMI.

Distintas fuentes consultadas por este portal no dudaron en calificar de “riesgosas” las operaciones llevadas a cabo por Vidal, teniendo en cuenta que el “ahorro” que se volcó a inversión financiera surgió lisa y llanamente de la subejecución presupuestaria y de la falta de atención de los servicios esenciales que brinda el Estado.

Claro que resulta imposible verificarlo, habida cuenta de que Buenos Aires atraviesa, desde hace nueve meses, un verdadero “apagón” informativo: no hay datos de la ejecución del Presupuesto ni de la evolución de la deuda. La última información dada a publicidad revela que, a septiembre de 2017, el Ministerio de Infraestructura, por ejemplo, llevaba ejecutado menos de la mitad del Presupuesto destinado a controlar inundaciones, a pesar de se había prometido que iba a ser un año “récord” en cantidad de obras.

Más datos revelan que no hay manera de que esos fondos provengan de un ahorro generado por una recaudación que supere las previsiones del gasto. De hecho, esos 82 mil millones significan todo lo que recaudó Buenos Aires en concepto de Ingresos Brutos y del Impuesto a los Automotores en lo que va del año.

Para alcanzar una idea de cuánto significan esos 82 mil millones, se puede consignar rápidamente que el 15 por ciento de aumento que ofreció la Provincia a los docentes este año tiene un costo fiscal de cerca de 18 mil millones de pesos y que llevar la oferta al 25 por ciento insumiría 30 mil millones, menos de la mitad de lo que Vidal se jugó en la “timba” de Macri.

Representan exactamente la mitad del presupuesto anual de la Dirección General de Cultura y Educación de este año; cinco veces el presupuesto de Infraestructura o incluso un poco más que el de Seguridad y el de Justicia combinados.

Además de la polémica que significa dejar de ejecutar fondos comprometidos a cuidar la salud, la seguridad y la educación de los bonaerenses, hay algún resquemor respecto del posible “recupero” de esas inversiones. Es que si bien los plazos de vencimiento no pasan de octubre de este año, cada “martes negro” siembra la sospecha de que, al final, las Lebacs se terminarán pagando en bonos a dos años o más, con rendimientos inferiores al 40 por ciento que hoy promete el Banco Central.

“No son inversiones, Vidal está financiando al Gobierno de Macri”, le dijo a este portal una reputada fuente en materia de Economía, quien recordó que al inicio de su mandato, luego de conseguir financiamiento en el exterior, Vidal salió al rescate de Macri vendiendo dólares frescos que en rigor debían destinarse a obras para evitar una corrida.

La buena noticia es que, si, más allá del riesgo, la jugada le rinde dividendos a Vidal habrá conseguido unos 5 mil millones de pesos en concepto de intereses. Con esa ganancia, le podrá ofrecer unos cuatro puntos más de incremento salarial a los docentes y cerrar un conflicto que está entrando en una fase decisiva.

Fuente: InfoCielo