Vuelve la polémica en Córdoba sobre presunto desembarco de “los correntinos” de la mano de Mestre
La sospecha de que el grupo Romero Feris llegó de la mano del intendente Mestre para tallar en el negocio de los servicios públicos, tomó fuerza tras una denuncia periodística. Ahora piden investigar si Ersa y Autobuses de Santa Fe no mantienen “una posición dominante” en el servicio urbano de pasajeros, lo que constituiría una violación al marco regulatorio al manejar el 75% del sistema de colectivos. Además, los Romero con Lusa tendrían más del 50% de la recolección de basura.
Una nueva polémica detonó en el despacho del intendente Ramón Javier Mestre cuando se supo que la empresa Ersa (de los Romero Feris) y Autobuses de Santa Fe no serían dos sino una sola, ya que comparten la administración, los espacios y hasta un fideicomiso, lo que de comprobarse sería violatorio de marco regulatorio del sistema de transporte público y de su cláusula antimonopolio.
De acuerdo a información publicada ayer en el diario Día a Día, los directivos de Ersa pidieron al municipio que se depositen los fondos en un solo fideicomiso, lo que en un principio fue rechazado por los funcionarios municipales, al menos hasta que se aclare la situación.
Es que de constatarse que Ersa y Autobuses funcionan como una misma empresa, significaría que manejan casi el 75% del transporte público de la ciudad de Córdoba, algo prohibido por la cláusula antimonopolio del marco regulatorio aprobado por el Concejo Deliberante, a lo que habría que sumarle más de la mitad de la recolección del servicio de basura de Lusa, que tiene un área un poco mayor a la de Cotreco.
Ambas empresas, Lusa y Ersa tienen hasta el mismo logotipo, que los vincula con los capitales correntinos de los Romero Feris, y explicaría -si se le aplica una mirada aguda y no desprovista de sana suspicacia- los motivos del viaje de Mestre a Corrientes al aniversario de esta empresa, con gastos pagos para él su cónyuge y la de varios de sus funcionarios, entre los que se incluye al viceintendente Marcelo Cossar.
La aceptación de esta invitación, confirmada por el propio Cossar en el programa ADN, que emite Canal 10, fue motivo de una presentación judicial del Frente Cívico, y ratificada ayer por el senador y titular de la fuerza, Luis Juez.
El frenesí del senador se dio luego que corrió la versión que el fiscal Hugo Amayusco podría apartarse de la causa, la que entraría en un derrotero judicial de imprevisibles derivaciones, salvo el hecho que la prolongación de los tiempos judiciales, y la falta de una sentencia, se sabe a quienes terminaría beneficiando.
La situación tomó ayer un nuevo cariz, lo que llevó al edil Esteban Dómina a presentar un proyecto en el Concejo Deliberante solicitando que se haga conocer el fideicomiso entre Ersa y Autobuses para ver más de cerca la forma en que se constituyó.
Dómina aseguró ayer que al haber un contrato de fideicomiso, la sociedad entre las dos firmas paso de ser de “hecho” a de “derecho”, lo que “constituiría una posición dominante con el manejo del 75% del servicio público”, algo expresamente prohibido en el marco regulatorio.
Si se tiene en cuenta la cantidad de dinero que maneja el transporte público, que suma al boleto que cada día pagan los usuarios, los subsidios al transporte nacional por dos vías, el adelanto mensual del Boleto Educativo Gratuito que realiza el Gobierno provincial, y los aportes millonarios de fondos que hizo el Palacio 6 de Julio para entregar a las privadas las empresas saneadas (Tamse y Ciudad de Córdoba), más unos 50 millones mensuales que se estima recibe Lusa de canon por la recolección de basura, no cabe duda que el desembarco del grupo de “los correntinos” representa un gran negocio para la privada.
La duda es si el municipio está haciendo buenos negocios que, en primer lugar, deben consistir en cuidar el bolsillo de los vecinos y dotarlos de los mejores servicios posibles.
