Construirán viviendas sociales ecosustentables en Villa María
La experiencia municipal, con apoyo de la UNVM, partirá de dos unidades. Tendrán energía solar y eólica, uso de agua de lluvia y otros aportes ambientales.
05/04/2016 MUNICIPIOSLa experiencia municipal, con apoyo de la UNVM, partirá de dos unidades. Tendrán energía solar y eólica, uso de agua de lluvia y otros aportes ambientales.
Con la premisa de aprovechar lo que natura nos da, el municipio villamariense quiere poner en marcha una prueba piloto para viviendas sociales pensadas en función del entorno utilizando las fuentes de energía “que llegan gratis y en abundancia a domicilio”, con un diseño que aproveche las condiciones de cada hora del día y de cada estación del año.
Según lo anunciado, en las próximas semanas comenzará a construir dos viviendas sociales experimentales en barrio Los Olmos, en colaboración con la Universidad Nacional de Villa María, que monitoreará el funcionamiento de las casas. No se brindaron precisiones sobre costos ni factibilidades de extender el proyecto a escalas más numerosas.
“En todo el mundo pagamos un costo inmenso para transportar agua, gas y electricidad a cada casa, cuando tenemos una gran cantidad de recursos que llegan gratis a domicilio, como el sol, la lluvia y los vientos”, razonó Pablo González, arquitecto a cargo del área de Viviendas del gobierno municipal local.
El proyecto comprende instalar un calefón solar para suministrar agua caliente, celdas de silicio que carguen baterías con el sol para iluminación, un generador eólico para aprovechar el viento y sumar más energía usando un recurso que en la zona es muy regular a lo largo del año.
Además, parte de la lluvia se recogerá con los techos y se almacenará en cisternas para usos que no requieren agua potable, como el inodoro, el baldeo de pisos y el lavado de ropa.
Un jardín vertical se colocará para proteger las paredes (con plantas) y cultivar verduras. Y se suma un digestor para depositar los residuos orgánicos que genere la familia y con ellos fabricar abono, que fertilice el suelo de los patios.
Otros aportes
La orientación y los materiales elegidos son parte del planteo “racional” de la vivienda. “No es lo mismo si el frente da para el norte o para el sur, o si la casa se hace en Ushuaia o en La Quiaca. Estamos acostumbrados a hacer todas la viviendas iguales, sin importar hacia dónde están orientadas. Hay que utilizar la cabeza y el compromiso”, sostiene González.
Propone una casa “activa”, en la que sus ocupantes la hagan funcionar ventajosamente. Se busca calefaccionarla por el sol, abriéndola al sol “bueno” del invierno, y protegerla del sol “malo” del verano. El gas se usará sólo para cocinar y las aberturas se ubicarán de modo que generen corrientes convectivas para refrescar la vivienda en verano.
Si bien el costo inicial es superior al de una casa de plan social básico, González apunta que debe analizarse su amortización en el tiempo con el ahorro de energía.
Las fuentes convencionales se seguirán utilizando, pero, bien manejada, calculan que la casa puede economizar hasta un 80 por ciento en consumo de agua, de luz y de gas.
La prueba puede servir para ser tomada luego en otras ciudades o en planes de mayor dimensión.