Río Tercero, en la incertidumbre por Petroquímica

La empresa suspenderá a 80 de los 341 empleados de planta y a 25 de firmas contratistas. Un vocero de la firma dice: “Por ahora no se habla de cierre”.

La empresa suspenderá a 80 de los 341 empleados de planta y a 25 de firmas contratistas. Un vocero de la firma dice: “Por ahora no se habla de cierre”.

El anuncio de Petroquímica Río Tercero de que paralizará al menos por dos meses la producción de su principal planta por dificultades de comercialización que arrastra desde 2015 genera inquietud en esta ciudad, donde es la tercera fuente de empleo industrial después de la Fábrica Militar y de Atanor.

La empresa ratificó que durante junio y julio le bajará la persiana a su planta de TDI (diisocianato de tolueno) y que por ese motivo suspenderá a 80 empleados, de los 341 que ocupa (casi el 25 por ciento del plantel), lo que también afecta a 25 personas de empresas contratistas. Los suspendidos cobrarían el 75 por ciento de sus salarios.

Marcelo García, vocero de la firma, precisó que la decisión involucra sólo a la planta de TDI, que representa un 60 por ciento de su facturación. “Las lineas de PAC (potabilizador), hipoclorito de sodio, soda cáustica y ácido clorhídrico continuarán normalmente”, acotó.

García argumenta que la crisis se debe a las autorizaciones de importaciones de tres mil toneladas de TDI provenientes de India, China y Corea, que significan para la planta local (única en el país) una producción de tres meses. Además, esos competidores ya le habían quitado mercados externos como Brasil.

Explicó que es difícil la competencia, no sólo por los precios sino por la capacidad de producción. Apuntó que la industria local puede generar 25 mil toneladas anuales, mientras que los importadores cuentan con plantas de 100 a 200 mil toneladas. Para este año –dijo– se proyecta para la planta local apenas 11 mil toneladas.

La apertura de importaciones chinas lleva varios años. Hace un año, la empresa solicitó un procedimiento preventivo de crisis que demandó suspensiones de 32 obreros. García acotó que la crisis de competitividad en este rubro se padece desde 2012.

El TDI se utiliza como materia prima para fabricar poliuretano (“goma espuma”), usado en la producción de colchones, la industria automotriz y otros destinos.

García subrayó que el Gobierno nacional se comprometió a no autorizar más importaciones de TDI en el año. Si eso se concreta, Petroquímica estima volver a producir TDI en septiembre, ya que después de la parada demanda un mes la puesta en marcha.

¿Qué pasa si la promesa no se cumple? García predijo que la situación será “muy complicada”, aunque aseguró que “por ahora no se habla de un cierre” de la firma.

Pero hay dudas sobre la viabilidad futura de su planta insignia. La empresa es del grupo Piero, de capitales nacionales, también dueño de varias marcas de colchones.

La medida de Petroquímica Río Tercero también afecta a la vecina y estatal Fábrica Militar, que le vende ácido nítrico, componente básico para la producción de TDI. Desde hace años, esa venta es la principal fuente de ingresos del complejo industrial estatal.

Fuente: La Voz del interior