De la Sota acentuó el reparto discrecional de fondos a municipios

El gobierno distribuyó 5 veces más dinero en el segundo trimestre en comparación con el primero.

El gobierno distribuyó 5 veces más dinero en el segundo trimestre en comparación con el primero.

Los datos surgen de la ejecución presupuestaria del segundo trimestre de este año difundida por el gobierno provincial.

De acuerdo a las cifras difundidas por la Provincia en su página web oficial (www.cba.gov.ar), en el segundo trimestre del corriente año la provincia acentuó el reparto discrecional de fondos a los municipios del interior, en sintonía con la campaña electoral que se dio antes de las elecciones de gobernador y vice del pasado 5 de julio.

Las intendencias justicialistas fueron como siempre las más beneficiadas con la entrega de estos subsidios cobrando más del 70% del total de dinero distribuido por estos programas presupuestarios provinciales. También recibieron algunas partidas los municipios radicales y en menor medida los del Frente Cívico y vecinalistas. Como ha sido una constante en los últimos 4 años, las administraciones kirchneristas quedaron totalmente marginadas de esta distribución.

En el segundo trimestre la Provincia distribuyó casi 30 millones de pesos de manera discrecional a diferentes intendentes.

Por Aportes del Tesoro Provincial (ATP) De la Sota entregó 25.054.730 pesos, casi 20 millones de pesos más que los 5.278.855 pesos cedidos en el primer trimestre del corriente año.

Si se tiene en cuenta el primer semestre, los 30.333.585 pesos entregados hasta el momento apenas superan los 29.492.410 pesos del año pasado, cuando el reparto general de coparticipación creció más del 26% hasta ahora.

En lo que respecta al Programa de Asistencia Municpal (PAM), en este segundo trimestre del año en curso la Provincia entregó a un reducido número de municipios y comunas 4.508.315 pesos. Como parámetro comparativo puede señalarse que en el primer trimestre no se había distribuido un solo peso por este concepto.

En 2014, a la misma altura del año, se habían entregado por PAM, 5.804.706 pesos, es decir 1,3 millones más que este año.

Los municipios justicialistas que más se beneficiaron en este primer semestre por el reparto discrecional de fondos que hizo José Manuel de la Sota son los de La Calera (recibió 1.570.000 pesos), Estación General Paz (1.010.000 pesos), Río Ceballos (900 mil pesos), Avellaneda (668 mil pesos), Villa Huidobro y Chaján (650 mil pesos), Brínkmann y Tío Pujio (500 mil pesos) y General Levalle (495 mil pesos).

Llama la atención que de los municipios que más sufrieron problemas por las inundaciones en el último verano sólo recibió un monto importante Río Ceballos administrada por el PJ. En cambio ni Mendiolaza, ni Unquillo ni Jesús María (gobernadas por la UCR y el Frente Cívico) se vieron beneficiadas por el reparto de estas ayudas extraordinarias del estado cordobés. Tampoco se vio favorecido con el reparto el intendente peronista de Bell Ville Nelson Ipérico distanciado de la administración provincial por la falta de apoyo para enfrentar los gastos generados por la inundación estival.

Fimuc

Siempre en función de las cifras informadas por la Provincia, en el primer semestre apenas se abonaron 22.990.785 pesos del Fondo de Infraestructura para Municipios y Comunas de Córdoba (FIMUC).

Esta cifra es ínfima si se tiene en cuenta que el presupuesto anual supera los 100 millones de pesos.

También la ejecución presupuestaria confirma que la Provincia no pagó un solo peso en los primeros seis meses de este año de los programas sociales de Niñez y Ancianidad que llevan adelante los diferentes municipios y comunas.

Los intendentes denuncian que también se les debe la mitad del año pasado y que no se les coparticipó este año el dinero recaudado por la Provincia en concepto de Tasa Vial. Sólo se les hizo un aporte correspondiente a la tercera cuota del año anterior que se les adeudaba.

Tampoco la Provincia abonó la parte que le corresponde a los intendentes de las multas que aplica la Policía Caminera.

De la Sota negó estas deudas por los programas sociales pero la ejecución presupuestaria de su gestión demuestra lo contrario.

Fuente: La Mañana de Córdoba