La CGT gana la calle con una advertencia: «Si no escuchan los reclamos, vamos al paro»

"El éxito de la movilización al Ministerio de Producción sería que el gobierno comprenda la solicitud de determinadas rectificaciones", dijo Daer.

«El éxito de la movilización al Ministerio de Producción sería que el gobierno comprenda la solicitud de determinadas rectificaciones», dijo Daer.

La Confederación General del Trabajo (CGT) advirtió ayer que para evitar el paro nacional el gobierno «tendrá que escuchar» los reclamos que la central plantee en la movilización de mañana, y aseguró que es una «fantasía que haya tironeos» internos dentro de la central obrera ante el eventual anuncio de una huelga nacional.

Así lo manifestó el diputado massista y triunviro de la CGT, Héctor Daer, quien puntualizó que «para que no haya paro tendrían que dejar de pensar en que no haya una apertura indiscriminada de la economías y ponerse a pensar de qué manera empezamos a desarrollar un modelo industrial».

En tanto, el jefe de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, consideró que durante marzo «el gobierno va a entrar en una pendiente y va a crecer la movilización popular», a la vez que aseguró que en la movilización de la CGT de mañana «se va a anunciar un paro nacional».

En la previa de la marcha al Ministerio de Producción en la que confluirán distintos espacios sindicales, políticos y sociales, tanto Daer como Yasky coincidieron en que se tratará de una movilización «multitudinaria» que el gobierno de Mauricio Macri «va a tener que tomar en cuenta».

Sin embargo, el dirigente de la CGT sostuvo que «el éxito de esta medida no es que hayan 200 mil, 300 mil o 500 mil personas, el éxito de estas medidas es que el gobierno perciba que hay un reclamo real de muchísimos sectores de la sociedad».

Exito y fracaso

«El éxito sería que el gobierno comprenda la solicitud de determinadas rectificaciones. Si esto no sucede y no escuchan, nos vamos a estar viendo involucrados en la convocatoria a un paro», advirtió Daer.

Consultado por las disidencias internas de la CGT frente a la eventual convocatoria a una huelga, Yasky opinó que «la operatoria contra el paro puede empezar después, pero cuando estemos en la calle, cientos de miles de trabajadores, el paro va a estar en la boca de todos».

Daer también negó que la marcha sea una medida política contra el gobierno en un año electoral, como afirman distintos funcionarios nacionales, al aseverar que la CGT sostenía las mismas exigencias para este gobierno como para con el kirchnerismo.

En este sentido, indicó que «estamos en la misma situación que antes» cuando «había proceso inflacionario, problemas en la economía», pero aseguró que antes «los trabajadores recuperábamos salarios» mientras «hoy hubo un ajuste brutal sobre sectores de ingresos fijos».

El dirigente gremial dijo luego que «el rumbo que le está dando al país con este cambio estructural lo único que nos va a generar es un país para menos habitantes, con un país exportador de materias primas básicas sin ningún tipo de valor agregado».

Por su parte, el titular de la CTA de los Trabajadores agregó que la movilización «expresa el rechazo a una política económica que significa pérdidas para los trabajadores», a la vez que enfatizó que el Ejecutivo «gobierna contra los intereses de la inmensa mayoría de los argentinos».

«No es que los que van a ir a la marcha, multitudinariamente, son los que no votaron a (el presidente Mauricio) Macri, acá van a ir a la marcha los que no votamos a Macri y los que lo votaron, porque esto no es una marcha partidaria, es una marcha para exigir un cambio de políticas económicas. Para decir «señores, no se puede gobernar solamente para los que tienen la plata»», sentenció.

Yasky destacó que la CTA de los Trabajadores, en conjunto con la CTA Autónoma, que dirige Pablo Micheli, aportará tropa propia.

En este sentido, Daer insistió en que desde la CGT no van a «poner un molinete» para impedir que determinado sector político participe de la movilización.

Momo, sin rumbo

El dirigente de los trabajadores rurales, Gerónimo «Momo» Venegas, consideró ayer que la movilización de la CGT es «más política que otra cosa» y pidió no olvidar «lo que puede hacer un gobierno corrupto», en referencia al kirchnerismo. Venegas (también titular de las 62 Organizaciones) opinó que «esta CGT no tiene rumbo».

Fuente: La Capital Rosario