Los pueblos del sur cordobes piden por la recuperación del tren de pasajeros

Este servicio que desparramó la semilla para la fundación de ciudades hace décadas, dejó de prestarse. Tras la concesión a capitales privados, en la región este transporte está afectado sólo al traslado de cargas

Este servicio que desparramó la semilla para la fundación de ciudades hace décadas, dejó de prestarse. Tras la concesión a capitales privados, en la región este transporte está afectado sólo al traslado de cargas

A la vera de las grandes rutas que atraviesan el sur provincial y tapadas por las malezas, las vías férreas resisten el paso del tiempo y esperan algún día volver a vibrar al paso de una locomotora llena de pasajeros.

Fue el ferrocarril el que dio nacimiento a cientos de pueblos en todo el sur cordobés. Y tras la decadencia de este servicio, muchas comunidades apenas quedaron como un punto de referencia en un mapa antiguo.
Sólo unas pocas líneas viales siguen activas en el territorio cordobés, pero sólo para transporte de cargas.

Fue  durante la presidencia de Carlos Menem cuando el servicio de trenes de pasajeros comenzó a desintegrarse. Así por ejemplo en marzo de 1993 dejaron de circular los trenes de pasajeros en el ramal Retiro-Mendoza-San Juan.

A partir de allí se puso en marcha un sistema de concesión a capitales privados.

En la zona de General Deheza y Cabrera es donde el tren sigue siendo parte del paisaje, pero el servicio sólo se circunscribe al traslado y movimiento de la producción de la Aceitera AGD, concesionaria del denominado tendido NCA. Son tres frecuencias diarias de trenes con alrededor de 70 vagones que trasladan la producción a los principales centros y puertos como Rosario, desde General Deheza, Dalmacio Vélez, General Cabrera.

El mantenimiento de las vías y los durmientes está a cargo de esta empresa privada, y son muy escasas las posibilidades de la reactivación para el servicio de pasajeros. En el tramo próximo a Deheza las vías muestran un buen mantenimiento, no así en localidades vecinas, donde hay cruces sin señalización y peligrosos.

En tanto, la línea que transita por Holmberg, Las Vertientes y de allí hacia el sur, fue en tramos “desguasada” por manos anónimas que sacaron parte de durmientes. Denuncias de por medio, nada se supo sobre el destino de este material.

Más al sur, en la zona de Buchardo y Huinca Renancó, vecinos y autoridades vienen elevando notas y reclamos para que el tren preste servicio de pasajeros. “Las vías están, hay que mejorarlas. Para los pueblos el tren sería un servicio más barato, y hasta una salida rápida para la producción hacia los puertos”, aseguran los vecinos.

Allá por el año 2014, el intendente Oscar Saliba elevó un informe a la Nación solicitando la restauración del tren de pasajeros. Ese año se reactivó el recorrido hasta Realicó (La Pampa) y esto alentó las expectativas de los habitantes del sur cordobés. Transcurridos tres años, nada se ha avanzado sobre este proyecto.

Con pocas excepciones, algunos trenes siguen moviéndose en las vías obsoletas y poco mantenidas de la región; ya no se detienen en las estaciones donde presurosos los vecinos se agolpaban dos veces al día para subirse al tren o simplemente, «ver quién llega o quién se va».

Era un acontecimiento social, como lo fue el tren convertido en transporte necesario, económico, seguro y accesible.

Desde aquella decisión que terminó con el servicio de pasajeros ya pasaron casi tres generaciones de habitantes de la zona que nunca subieron a un convoy.

Proyecto nacional

Tras el convenio que el presidente Mauricio Macri acordó con la empresa Railway Construction Corporation Limited (CRCC) de China,  las condiciones para rehabilitar integralmente el sistema de cargas del exferrocarril San Martín podría extenderse hasta dos años para la recuperación total de una red ferroviaria que atraviesa a lo ancho el país.

El plan contempla la renovación completa de 1.626 kilómetros de vías, con durmientes de hormigón y madera, 120 puentes, 1.600 kilómetros de señalamiento y 400 pasos a nivel. Este ferrocarril, cuya línea fue llamada «la general», une Retiro con estaciones de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, San Luis, Mendoza y San Juan.

Por estos días está arribando al país material rodante (vagones y locomotoras) de fabricación china, y algunos operan en cargas desde hace algunos meses por la zona de Justo Daract. Ya hay tramos de vías que han sido restaurados y permiten la llegada de trenes de pasajeros desde Buenos Aires hasta Rufino.

Esperanzas

«La noticia es muy buena y confiemos en que se pueda llevar a cabo; digo esto porque se habló mucho del ferrocarril y hasta en algún momento nos hicieron creer que suspenderlo era bueno porque el país perdía dos millones de dólares diarios. Lo cierto es que desde ese momento carecemos de un servicio esencial y solamente los trenes quedaron para Buenos Aires, el interior nada», tal las reflexiones de Vito Medel, presidente de la Sociedad Rural de Vicuña Mackenna.

«De la capacidad de carga ni hablar. Un tren transporta 50 vagones de alto tonelaje. Hoy las rutas son un peligro, con muertes constantes porque la totalidad de la producción del país se transporta por camiones que destruyen los caminos y que generan altos costos de mantenimiento».

Tanto Medel como Héctor Luis Laborde consideraron que pueblos como Vicuña Mackenna, General Levalle y Justo Daract progresaron gracias al ferrocarril, un medio eficaz y más aún si se suma el servicio de pasajeros.
En diciembre del año pasado se compraron locomotoras para el tren de cargas de origen chino: las últimas tandas de locomotoras de origen americano fueron compradas bajo el gobierno de Agustín Lanusse, hace 44 años, muchas de las cuales siguen funcionando.

Ricardo Reynoso, intendente de Chaján, sostuvo que el convenio por la reactivación del ramal Retiro-Cuyo es una gran noticia. Esta localidad se verá beneficiada porque desde allí se saca la piedra de las canteras existentes en la zona.

Pero el clamor de los pueblos del interior es volver a tener el tren de pasajeros y con él lograr la integración y el desarrollo de las comunidades de la provincia y del país.

Fuente: Puntal