Santa Fe, ¿la que más obras recibe de la Nación?

Entre enero y mayo pasados los fondos del Estado nacional destinados a obras públicas ascendieron a 52 mil millones de pesos. El 28 por ciento se concentró en Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Entre enero y mayo pasados los fondos del Estado nacional destinados a obras públicas ascendieron a 52 mil millones de pesos. El 28 por ciento se concentró en Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Los gobernantes y políticos usualmente manipulan la realidad para acomodarla a sus intereses y estrategias de comunicación, con lo cual muchas veces propagan informaciones inciertas, parcialmente ciertas o abiertamente falsas. Y mucho más en tiempos electorales. Montañas de ejemplos hay en este sentido tanto a nivel internacional, nacional como comarcal. Así, el presidente Mauricio Macri subrayó el 2 de febrero pasado en una visita que realizó a Rosario que «Santa Fe va a ser la provincia que más obras recibirá de la Nación». Y a partir de ese entonces esta frase la vienen repitiendo dirigentes locales de Cambiemos. ¿Pero esa afirmación se ajusta rigurosamente a la realidad?

Según un reciente informe de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (Asap), los fondos del Estado nacional destinados a obras públicas ascendieron a 52.271 millones de pesos entre enero y mayo pasados (la suma de la inversión real directa y las llamadas transferencias de capital a provincias), un aumento de nada menos que 69 % contra igual período del año pasado.

El primer dato que se destaca a la hora de su distribución territorial es que el 28% de ese total se concentró en sólo dos de los 24 distritos: la provincia de Buenos Aires, con el 19%, y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que se devoró el 8,8%. Ambas jurisdicciones están gobernadas por el PRO, con lo cual María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta son los grandes ganadores de este reparto de obras que discrecionalmente realiza el poder central. En este ranking le siguen Córdoba con el 4,8% del total del dinero invertido por Nación, Santiago del Estero (4,2%), Santa Fe (4,1), Chaco (4) y Río Negro (3,9).

Si se analizan las provincias que más incrementaron este año los recursos nacionales para obras en comparación con lo percibido en 2016, el estudio realizado por Asap sostiene que se repiten casi los mismos ganadores. Vidal recibió en los primeros cinco meses de 2017 el doble que el año pasado (101%), mientras que Rodríguez Larreta la sigue de cerca con el 92%. Esta tabla está lidera por el gobernador jujeño, el radical y aliado al macrismo Gerardo Morales, que fue beneficiado con una suba del 122% en los fondos nacionales que recibió su provincia destinados a inversión pública. En cambio, lo destinado a Santa Fe sólo se incrementó un 35%, ubicándose en este ranking de 24 distritos sólo por encima de Chaco (19%), La Pampa (24%) y San Juan (26%).

Más allá de que circunstancialmente por razones políticas alguna provincia reciba una buena tajada del reparto de esta torta, lo que se mantiene constante en todos los gobiernos nacionales es la concentración de recursos públicos en la Ciudad de Buenos Aires. Es que en Argentina a la inequidad entre ricos y pobres hay que sumarle la existente entre habitantes de la Capital Federal y del conurbano bonaerense versus habitantes del interior. Estas son las dos grietas reales que existen, las otras se fogonean mediáticamente y son sólo discursivas.

Mientras el interior sigue mendigando su lugar en el mundo ante los gobiernos centrales de turno, las macropolíticas nacionales concentran todos sus esfuerzos en planificar el eje porteño-bonaerense. Así, el tándem ciudad autónoma-megaprovincia le viene costando demasiado caro al país.

Una muestra de ello es lo que sucede con el servicio de provisión de cloacas y agua corriente. La empresa AySA (Agua y Saneamientos Argentinos), en manos del Estado nacional, sólo atiende las necesidades de porteños y habitantes del Gran Buenos Aires. En los primeros cinco meses del año, el gobierno central ya le transfirió 4.651 millones de pesos, Mientras tanto, en el interior cada provincia o municipio se las arregla solo. Por si fuera poco, el miércoles pasado Macri puso en marcha una megaobra de cloacas de AySA, que prevé la construcción de un túnel de 12 kilómetros a lo largo del Riachuelo, con una inversión del gobierno nacional de 1.200 millones de dólares. Los trabajos que pagarán todos los argentinos beneficiarán sólo a la Ciudad de Buenos Aires y a 14 municipios del conurbano bonaerense. En cambio, en Rosario, por ejemplo, el gobierno central —como ya es su costumbre— se desentiende de la inversión en infraestructura de saneamiento, que se realiza casi en su totalidad con fondos de la provincia y el municipio. Como gran concesión, la Casa Rosada otorga por goteo algunas obras, como la que se está licitando para dotar de cloacas al barrio Roque Sáenz Peña, donde se ha comprometido a solventar el 67% de una inversión total que asciende a algo más de 3 millones de dólares. La diferencia de montos habla por sí sola.

Uno podría preguntarse dónde están los diputados y senadores nacionales del interior. ¿Sólo sobreactúan los reclamos de federalismo cuando se acercan las elecciones? ¿Por qué no se plantan firmes cuando cada año se vota el presupuesto en el Congreso? ¿Todo es moneda de cambio en la política?

Uno de los roles centrales del periodismo, y más en tiempos de la posverdad y de informaciones falsas que se propagan y se repiten por las redes sociales, es verificar la veracidad de los discursos públicos contrastándolos con fuentes primarias y con la opinión de especialistas, tal cual lo realiza muy profesionalmente a nivel nacional el sitio web Chequeado. Es responsabilidad de los medios de comunicación pedir a gobernantes y políticos evidencias que sostengan lo que se afirma, buscar los datos, las pruebas, discernir entre lo verdadero, falso, engañoso, exagerado o discutible.
¿Santa Fe es la provincia que más obras recibe de la Nación? Ni por asomo los números duros dicen eso.

Fuente: La Capital Rosario