Lejos de la pobreza cero: cientos de personas marcharon para denunciar que “el hambre es un crimen”

En la Argentina hay más de 5 millones de niños pobres, más un aproximado de 1.600 de niños y niñas en estado de indigencia.

En la Argentina hay más de 5 millones de niños pobres, más un aproximado de 1.600 de niños y niñas en estado de indigencia. Frente a esta dura realidad, organizaciones sociales reclamaron mayor presencia del Estado y advirtieron que sus comedores “están desbordados”.

Hace poco, organismos como Unicef sostuvieron que en Argentina hay unos 5,6 millones de chicos pobres. Esto equivale a uno de cada tres menores en la línea de pobreza. Sumado a que también se registran 1.600 niños y niñas considerados en estado de indigencia, es decir, que apenas pueden comer y llevar una vida normal.

Como si fuera poco, también la medición a cargo de la Universidad Católica comparó la situación gravísima de pobreza que afecta principalmente a los mas jóvenes y consideró que la pobreza entre los niños y adolescentes de 0 a 17 años alcanza el 58,7% de todos los pobres en el país. Es decir, unos 7,6 millones de niños y jóvenes.

Pese a que la nueva medición del Indec informa una baja en los niveles de pobreza registrados en 2016, lo cierto es que la realidad parece mostrar un rostro mucho más creíble y palpable.

Las estadísticas que miden la pobreza infantil son un duro golpe a la credibilidad de un gobierno que hizo gran parte de su campaña proponiendo un país con “pobreza cero”, objetivo que hoy se aleja cada vez más a partir de las políticas de endeudamiento, despidos y ajuste.

Frente a esa inseguridad social, el pasado viernes diferentes organizaciones sociales y políticas de La Plata y alrededores realizaron una nueva marcha con la consigna de “El Hambre es un crimen”, irrumpiendo con una frase que no se puede oír seguida pero que perfectamente es posible comparar con otros crímenes televisados.

“Estamos todos juntos, La Plata, Berisso, Ensenada y Olmos. Copas de leche, comedores, casitas de Día, hogares, todos juntos peleando por una niñez digna”, dijeron para QM Noticias alguno de sus organizadores.

Desde la voz directa de los barrios más postergados, explican que “cada vez llegan más chicos” a las casas de contención, como las de Día, Hogar de tránsito y comedores barriales: “a veces esa comida es el único plato fuerte que tiene durante todo el día y a la noche no cenan. Cuando van al otro día a la casita eso se nota”, describen con dureza.

Cómo impacta la pobreza en los chicos

Según el informe que presentó el año pasado Unifec, el organismo que se dedica a la salud y el bienestar de los niños y niñas, hay diferentes grupos de edades donde se mide el impacto de la pobreza en la niñez: los que van de 13 a 17 años son los más afectados y suman el 51% de todos los chicos pobres. Le siguen los que van de 5 a 12 años con el 48%. En último lugar, se encuentran los bebes que van de 0 a 4 años, con el 45%.

A su vez, existen desigualdades entre los propios niños pobres: de la franja que va de 0 a 4 años, “hay una clara desventaja para las niñas”, informan.

Por último –casi como una obviedad, pero no tanto- el informe advierte que los y las niñas pobres tienen más posibilidad de seguir siéndolo, si en su casa los padres o jefes de hogar no perciban un trabajo formal o ayuda del Estado.

Además, desde Unicef explicaron que “si bien la pobreza afecta al 47,7% de los niños, la tasa aumenta al 85% cuando el chico reside en un hogar cuyo jefe o jefa está desocupado, al 64% cuando es inactivo o al 65% cuando es asalariado informal».

Frente a esta dura realidad, las organizaciones sociales y políticas que conocen del tema, por vivirlo día a día en los barrios más pobres de Berisso, Ensenada y La Plata, le piden a los gobiernos municipales, provincial y nacional, una mayor presencia y políticas de inclusión que permitan revertir esta situación alarmante.

Fuente: InfoCielo