En 2017, más de 48 mil votantes eligieron representantes en los centros vecinales de Córdoba

Hubo 106 comicios en los distintos barrios de la Capital. El 93,5 por ciento de los centros vecinales se encuentran regularizados. La disputa electoral recrea en algunas barriadas los clásicos partidarios.

Hubo 106 comicios en los distintos barrios de la Capital. El 93,5 por ciento de los centros vecinales se encuentran regularizados. La disputa electoral recrea en algunas barriadas los clásicos partidarios.

Además de las elecciones nacionales, 2017 también fue movido en los barrios, donde más de 48 mil vecinos eligieron a comisiones de 106 centros vecinales. Según los datos de la Dirección de Políticas Vecinales de la Municipalidad de Córdoba, el 93,5 por ciento de esas entidades se encuentran normalizadas.

Los centros vecinales son la primera instancia de participación que reconoce la Carta Orgánica Municipal, y para su funcionamiento deben tener autoridades elegidas por los residentes de un barrio. Están regidos por la ordenanza 10.713, y la Municipalidad es la que los autoriza y controla.

Las comisiones están integradas por entre siete y 15 personas que deben trabajar ad honorem, con mandatos que duran dos años. Son los encargados de intermediar entre el municipio y los vecinos las mejoras barriales.

En 2011, había en la ciudad 291 centros vecinales (CV), de los cuales apenas 110 tenían sus autoridades vigentes. Los 181 CV restantes estaban sin dirección, es decir, en estado de acefalía. Apenas se registraban 36 elecciones por año, de las que participaban 7.200 votantes promedio. Tampoco había registros en el municipio sobre los estados contables y administrativos de los municipios.

“Estábamos en una situación donde los vecinalistas no tenían fuerza real en los barrios. No representaban a nadie. Era necesario democratizar las entidades y romper con viejas prácticas clientelares”, sintetiza Jaime Juaneda, director de Asuntos Vecinales del municipio.

En 2017, el panorama es muy distinto: hay 316 centros vecinales de los cuales el 93,5 por ciento están regularizados; se dieron 106 procesos electorales y participaron 48.498 vecinos. La proporción de lista única es mucho menor.

Y si se suma 2016, se desarrollaron 227 elecciones con una participación de 126 mil vecinos aproximadamente. Eso implica que hay más de 2 mil cordobeses involucrados en una comisión barrial.

Se hace política

Hasta 2009, la ordenanza 10.723 prohibía que los miembros de comisiones de centros vecinales tuvieran cargos políticos partidarios. Ese año, se aprobó la ordenanza 11.692 y se derogó esa veda.

Por eso, las elecciones de los centros vecinales suelen ser escenario de disputas partidarias. Por ejemplo, en septiembre de 2016, en barrio Nueva Córdoba, una lista filo radical se impuso por apenas 26 votos a otra con fuerte presencia kirchnerista.

O en el populoso Villa El Libertador, cuyo centro vecinal está liderado por Aldo Ortega, con fuertes vínculos al Surrbac, el sindicato de recolectores de residuos de Julio Saillen.

Listas vinculadas a ese sindicato también se presentaron, en junio pasado, en los barrios Comercial y Kennedy, pero en el primer caso perdieron con un grupo cercano a Unión por Córdoba y en el segundo contra una agrupación filo radical.

Y también se producen crisis internas, como la del centro vecinal Alberdi. En 2016, una lista con vecinos de distintos extractos políticos (Frente Cívico, Nuevo Encuentro, Frente Grande) le ganó a un grupo cercano al radicalismo. Ese centro vecinal lideró los reclamos contra el aumento de tarifas dispuesto por el Gobierno nacional. Pero en agosto último, durante la campaña para las elecciones nacionales, el grupo Defendamos Alberdi abandonó sus puestos en la comisión del centro vecinal por discrepancias con la presidencia. El detonante fueron fondos recibidos de parte de la Secretaría de Equidad provincial, liderada por la entonces candidata a diputada nacional Alejandra Vigo.

El director de Asuntos Vecinales del municipio asegura que la postura oficial es que no haya comisiones partidarias. “Los que siguen políticas partidarias son los menos, cuando son menos partidarios funcionan mejor”, apuntó Juaneda.

Un sistema participativo que crece

En 2011, en la ciudad de Córdoba había 291 centros vecinales. Seis años después, en 2017, la cifra llegó a 316.

En regla. En 2011, sólo algo más de un tercio de los centros vecinales tenían sus autoridades actualizadas. En 2017, el avance llegó al 93,5 por ciento.

Para entender: Lo que tiene que saber todo vecinalista

Presupuesto Participativo. Dentro del presupuesto municipal existe una partida que se destina a obras decididas a través de las Juntas de Participación Vecinal, conformadas por los centros vecinales de cada Centro de Participación Comunal (CPC). Para 2017, fueron unos 200 millones de pesos.

Boleta única. Desde septiembre de 2016, la Municipalidad de Córdoba implementó para las elecciones en centros vecinales la Boleta Única de Sufragio. Según el municipio, la medida busca brindar igualdad entre las distintas agrupaciones que se presentan. La Municipalidad se hace cargo de los gastos de impresión.

Plan de metas. La Municipalidad capacita a las distintas agrupaciones para que en el proceso electoral elaboren un plan de metas de gestión. Y, sobre la base de ese plan, se generan debates entre las agrupaciones rivales.

Plataforma participativa. La Dirección de Asuntos Vecinales anunció que durante el presente año se implementará una plataforma de participación ciudadana, vía web y aplicaciones. Será vinculante, y permitirá realizar consultas al municipio de manera directa.

Fuente: La Voz