Tras escandalosas detenciones, Cambiemos aprovecha y quiere modificar la ley de los sindicatos

Con dirigentes gremiales encarcelados acusados de corrupción y con la reforma laboral en la mira, el gobierno nacional impulsa otra discusión que apunta a los gremios. Por el momento proponen limitar los mandatos.

Con dirigentes gremiales encarcelados acusados de corrupción y con la reforma laboral en la mira, el gobierno nacional impulsa otra discusión que apunta a los gremios. Por el momento proponen limitar los mandatos.

Mientras varios dirigentes gremiales con cuentas multimillonarias en su poder se encuentran tras las rejas involucrados en causas donde la transparencia brilla por su ausencia, Cambiemos aprovecha el momento e impulsa el debate para modificar la ley de Asociaciones Sindicales. Con la reforma laboral cocinándose con la colaboración de la CGT, por el momento apuntan a limitar los mandatos pero queda la puerta abierta para meter mano a más cambios a la herramienta que utilizan los trabajadores para defender sus derechos.

De todos modos, en la intención de Cambiemos de debatir la ley de Asociaciones Sindicales sobrevuela un halo de oportunismo que deja una puerta abierta sobre sus verdaderos objetivos. La polémica reforma laboral que contiene puntos que vulneran los derechos de los trabajadores precisa sindicatos más débiles y es una buena oportunidad para el oficialismo debatir la normativa que rige su funcionamiento.
La reciente y escandalosa detención del secretario general de SOEME, Marcelo Balcedo, y casos como el de Omar “Caballo” Suárez y Juan Pablo “Pata” Medina de la UOCRA, ponen en duda la legitimidad de los líderes sindicales que hace decenas de años permanecen en el sillón dañando la democracia interna de los gremios. Si bien no son los únicos con estas características – los hay tanto oficialistas como opositores a Cambiemos-, ha quedado en evidencia que esta forma de conducir está sumamente cuestionada, por caso la conducción de la CGT.

Por ese motivo, el oficialismo vio luz y a través de  la diputada nacional, Soledad Carrizo, impulsa la modificación de la ley de Asociaciones Sindicales. Es que la legisladora consideró que estos casos “abren una gran oportunidad” para discutir proyectos que plantean la limitación de los mandatos gremiales y propone “la renovación y la alternancia de las autoridades sindicales”.

En ese aspecto, aclaró que “la motivación de este debate no es debilitar al sindicalismo, sino más bien fortalecerlo”, en declaraciones al diario La Nación.

A su vez manifestó que “el sindicalismo debe castigar los hechos de corrupción” y criticó a quienes se “han enriquecido durante los últimos 50 años”. Entonces cargó contra camioneros, gastronómicos, taxistas y sindicalistas del correo. Sin embargo la diputada se olvidó de mencionar a quien fuera conductor de la UATRE y titular de las 62 Organizaciones Gremiales Peronistas, el fallecido Gerónimo “Momo” Venegas.

El extinto líder del sindicato de peones rurales (desde 1993 hasta su fallecimiento en 2017) fue el gremialista más íntimo al presidente Mauricio Macri. De hecho, el Jefe de Estado compartió un acto del Día del Trabajador junto a él durante el 1 de mayo de 2017. El oriundo de Necochea se encontraba bajo la lupa de la justicia investigado en la causa denominada la “mafia de los medicamentos” y por la cual estuvo detenido.

Sin dudas habrá sectores que se opongan a la limitación de los mandatos por el simple motivo que ataca a sus privilegios mientras que otros realizan ese reclamo hace años y piden mayor democracia y libertad sindical.

De todos modos, en la intención de Cambiemos de debatir la ley de Asociaciones Sindicales sobrevuela un halo de oportunismo que deja una puerta abierta sobre sus verdaderos objetivos. La polémica reforma laboral que contiene puntos que vulneran los derechos de los trabajadores precisa sindicatos más débiles y es una buena oportunidad para el oficialismo debatir la normativa que rige su funcionamiento.

Fuente: InfoCielo