Alojarse en las Sierras Cordobesas costará 31,5% más caro que el verano pasado

Es el promedio de la suba de un verano a otro, que va de 11% a 56%, según un relevamiento propio en hoteles, cabañas y campings. Hay mucha variabilidad entre establecimientos, según las categorías y los lugares.

Es el promedio de la suba de un verano a otro, que va de 11% a 56%, según un relevamiento propio en hoteles, cabañas y campings. Hay mucha variabilidad entre establecimientos, según las categorías y los lugares.

Arrimar certezas sobre cuánto pagarán de incremento en las tarifas los turistas que elijan alojarse en las Sierras cordobesas en enero de 2017, respecto del mismo mes del año anterior, no resulta sencillo si la idea es culminar con una cifra redonda.

Podrá resumirse que, en promedio, el ajuste se ubica en un 31,5 por ciento. Pero son tan variables los números entre un establecimiento y otro que resulta más preciso afirmar que ese turista podrá pagar desde un bajo 11 por ciento hasta un muy alto 56 por ciento de aumento.

En el medio hay ajustes de todos los colores. El 31,5 por ciento representa la media de los incrementos aplicados. La lista que acompaña este informe muestra esa variabilidad de porcentajes, por lo que bien vale consultar y comparar antes de contratar.

Los datos surgen del relevamiento que, como cada año, realiza La Voz comparando los precios para enero en los mismos 20 establecimientos de nueve localidades serranas.

La lista, que se repite idéntica desde 2009, contempla hoteles y cabañas de variadas categorías, pero también casas de alquiler, hospedajes y campings.

El promedio no difiere mucho de las estimaciones que medios de Buenos Aires han hecho, por ejemplo, respecto de los también variables aumentos previstos en los balnearios de la costa atlántica (ver aparte).

El incremento promedio para 2017 en Córdoba es el mayor –aunque por leve diferencia– de los nueve años que lleva este relevamiento.

Matices

El cuadro adjunto muestra los 20 sitios de alojamiento relevados por las corresponsalías del diario. En cada localidad, de todos modos, hay precios por encima y por debajo de los citados, que sólo son indicativos para dar cuenta de la evolución de un año a otro.

En cabañas para cuatro personas, por ejemplo, se podrán conseguir desde los mil a los cinco mil pesos por día, dependiendo de la infraestructura y de los servicios que ofrezcan. Desde las que no tienen piletas ni desayuno, hasta que las que suman piletas climatizadas, mucamas, campos de deportes y hasta cancha de golf. Entre medio, hay de todo.

Para hoteles, por ejemplo, una habitación doble en categoría tres estrellas (con pileta y desayuno) va desde los 1.300 hasta los 1.890 pesos por noche en enero.

Parecido

La suba promedio relevada del 31,5 por ciento es similar a la del año anterior (30,1 por ciento). Es algo superior a la que las oficinas de Turismo de varios municipios hubieran esperado, para mejorar las chances de competitividad y asegurar más movimiento.

Pero las cámaras de hoteleros y cabañeros plantean que está por debajo de la inflación anual. El punto es que se entremezclan establecimientos que ajustaron por debajo y otros que lo hicieron por encima de la inflación.

En Córdoba, la Dirección de Estadística y Censos de la Provincia midió una inflación anual del 40,5 por ciento (de octubre a octubre), mientras que lleva sumado un acumulado de 30,5 de enero a octubre de 2016.

“Hay mucha competencia, cada vez más oferta disponible para el turista. Con los precios intentamos, al menos, no quedar tan atrás de la suba de costos”, marcó un dueño de cabañas en Calamuchita. “La rentabilidad del sector viene disminuyendo desde hace años, pero si actualizamos los costos reales bajaría la demanda”, apuntó un hotelero de La Falda.

Comparando los precios de 2009 y de 2017, la misma cabaña en Nono que cobraba 300 pesos por noche, nueve veranos después costará 1.950 pesos. El aumento representa un 550 por ciento.

Fuente: La Voz