Castigarían actividad de “naranjitas” ilegales en Córdoba
Quejas. No son pocos los casos de excesos denunciados que provocan los llamados “naranjitas” no autorizados
La normativa podría incluir una figura que regule el trabajo de quienes cuidan vehículos en la calle. Hoy no existe una herramienta para actuar en casos de abusos.
En principio, el vecino no está obligado a pagar por el estacionamiento en calles públicas. Sólo debe hacerlo si el cuidador pertenece a una cooperativa autorizada por el municipio para prestar el servicio, exhiba credencial y le entregue al conductor un ticket oficial.
Sin embargo, la presencia de “naranjitas” ilegales (no autorizados) está en casi todas las cuadras que se usan como estacionamiento habitual en la ciudad de Córdoba.
Hay de todo: desde los que piden una colaboración voluntaria, hasta los que solicitan una tarifa fija –y onerosa–. Entre estos últimos, las amenazas son moneda corriente.
Ante estos casos, salvo que se trate de una situación extrema y flagrante, desde la Policía como desde el municipio capitalino no tienen herramientas suficientes para controlar el accionar de los cuidadores de autos sin autorización.
La Municipalidad de Córdoba arguye que no tiene poder para detenerlos. La Policía, en tanto, dice que sólo pueden actuar en caso de que cometan un delito, como amenaza, coacción, daños o lesiones.
Es que el Código de Faltas vigente, que supuestamente es un ordenamiento para facilitar la convivencia comunitaria, no prevé como contravención la actividad de los naranjitas no autorizados.
La nueva normativa podría incluir una figura que contemple la actividad de quienes trabajan cuidando coches en la vía pública.
Antecedente
En la ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, el Código Contravencional sí prevé estas conductas.
Sin embargo, no están exentos de problemas. El artículo 79 castiga a quienes exigen dinero a cambio de cuidar un auto estacionado, pero no a quienes reciben una contribución voluntaria.
“Y ahí es donde la Fiscalía pone el alerta: con estas normas, el problema es que se hace muy difícil probar los aprietes, sobre todo porque para eso hacen falta testigos, y entonces no puede haber sanción”, publicó Clarín en julio pasado.
Según datos oficiales, en la Ciudad de Buenos Aires hay 10 denuncias por día contra “cuidacoches”.
Así, el crecimiento de la cantidad de “cuidacoches” ilegales en la ciudad de Córdoba se da tanto por la falta de control pero en especial de regulación.
Ante esta realidad, una de las ideas del oficialismo es crear una figura en el nuevo Código de Faltas (que pasará a llamarse Código de Convivencia) que sancione la actividad de los naranjitas no autorizados por la Municipalidad de Córdoba.
“Es una de las ideas que pensamos incluir”, aseguró a este diario Sergio Busso, presidente de la bancada oficialista.
