Con apoyo delasotista, el Intendente de Córdoba tiene su Ente
Con los votos radicales y el aval de UPC, el Concejo Deliberante aprobó el Ente de Servicios y Obras Públicas (ESyOP). El Suoem prometió continuar la lucha hasta que el organismo sea dado de baja. Fuertes cruces en una sesión caliente.
El radicalismo logró aprobar en una acalorada sesión del Concejo Deliberante la creación del ESyOP, tras acordar algunos puntos con el bloque delasotista, los que aparentemente renovaron el pacto tras hacerle ganar las elecciones al radical.
Los dos bloques Eva Duarte y Compromiso Ciudadano rechazaron la iniciativa, que le permitirá al intendente manejar 20.000 millones de pesos en cuatro años sin control del Tribunal de Cuentas.
En tanto, el gremio de los municipales se mantuvo en pie de guerra con la intendencia y anunció que las medidas de fuerza no terminarán hasta que no se dé de baja al nuevo organismo.
La aprobación del Ente se produjo sin que el proyecto fuera debatido en ninguna de las comisiones del CD. De hecho, la última oportunidad de discutirlo fue el miércoles en Desarrollo Urbano, que finalmente se suspendió por falta de quórum, como denunciara la concejala Olga Riutort. La votación terminó 21 a 8. Durante la sesión se produjeron numerosos cruces entre el viceintendente Marcelo Cossar y los concejales Miguel Siciliano (Bloque Eva Duarte) y Esteban Dómina (Compromiso Ciudadano), que rechazaron el nuevo instrumento y cuestionaron su legalidad.
Mientras Cossar defendió su creación, indicando que “el municipio va a lograr mayor eficiencia en la realización de obras y además logrará reducir costos impositivos”, Dómina sostuvo que “no es necesario crear un Ente autárquico para realizar lo que se pretende, ya que el municipio puede realizarlo con sus propios empleados, además de sumar autoridades extras de rango de secretario y subsecretario con los costos que ello implica”. Asimismo, Siciliano denunció que el organismo tendrá “faltas de controles por parte del Tribunal de Cuentas». «¿El principal control estará dado por una auditoría externa que es contratada por el propio Ejecutivo?”, se preguntó.
Siciliano y Cossar se cruzaron airadamente, en uno de los momentos mas tensos de la sesión. Fue cuando el edil opositor acusó al viceintendente de «reírse» de sus argumentos. «Cuando se quita claridad y trasparencia a los procesos, se acerca la corrupción”, resaltó.
En el caso de Dómina, el cruce llegó casi a los estrados judiciales. Cossar le endilgó «haber sido echado» del gobierno provincial (el concejal fue ministro de Finanzas durante el primer gobierno de José Manuel de la Sota) por supuesto mal desempeño. Dómina negó la acusación y advirtió a Cossar que estaba «en las puertas de una querella» por tal afirmación. Finalmente, el segundo de Ramón Mestre pidió disculpas y ensayó una explicación a sus palabras, en medio de un papelón.
“Lamento mucho que terminemos como la primera sesión , donde tuvimos las mismas palabras, la misma soberbia y mentiras en boca de los concejales acerca de este gobierno. Pero hoy fueron mas allá porque ahora denostaron a los vecinos y especialistas que vinieron a la audiencia pública. La sociedad ya se expresó hace unos días en contra del agravio. Algunos no se toman el trabajo de leer el proyecto”, descargó Cossar al finalizar la caliente sesión. Siciliano lo acusó de haber entregado el proyecto minutos antes del inicio de la sesión.
