Con el aporte de la recesión
El derrumbe de las compras del exterior, debido a la profunda caída del mercado interno, acomodó el resultado del intercambio comercial.
El derrumbe de las compras del exterior, debido a la profunda caída del mercado interno, acomodó el resultado del intercambio comercial.
El intercambio comercial arrojó un superávit de 460 millones de dólares en febrero, contra el déficit de 892 millones de igual mes del año pasado. El resultado favorable del sector externo se explicó por una fuerte caída de importaciones: 22,9 por ciento. Las exportaciones, mientras tanto, marcaron un avance del 3,7 por ciento explicado por el sector agropecuario. Los datos muestran que el superávit comercial no se consiguió por la mayor competitividad cambiaria, sino por el desplome de la demanda agregada.
Las importaciones sumaron el mes pasado 5196 millones de dólares, lo que implica que bajaron casi en una cuarta parte respecto de las del 2018, cuando no había estallado la crisis cambiaria ni el derrumbe del mercado interno. Los rubros de importación que más bajaron fueron los vinculados a la inversión y los bienes durables. El bloque de bienes de capital anotó una merma del 32,6 por ciento interanual, mientras que vehículos automotores de pasajeros marcó un retroceso de 46,5 por ciento. Además la importación de bienes de consumo anotó un retroceso de 28,8 por ciento, al tiempo que bienes intermedios bajó 9,8 por ciento y piezas y accesorios, un 18,2.
En lo que refiere a las exportaciones, sumaron 4304 millones de dólares y avanzaron cerca del 4 por ciento. Este aumento se explicó por el avance de las manufacturas de origen agropecuario, con un incremento del 4,1 por ciento, al tiempo que las de origen industrial (en donde se computan los aceites) subieron 5,5 por ciento. A su vez, combustible marcó un alza del 3,0 por ciento y productos primarios (1,2 por ciento).
En el detalle por productos exportados, se destacó el incremento de las ventas de carne (27,1 por ciento), de grasas y aceites (39,4 por ciento) y de materia de transporte (12,2). En contraste, se registraron retrocesos en productos alimenticios, bebidas y tabaco (-12,6 por ciento) y productos de industria química (-8,5 por ciento). Otro rubro con caídas, pese a la suba del tipo de cambio, fue minería (-9,9 por ciento).
En el detalle por productos importados, se subrayó el fuerte retroceso del 46,9 por ciento de equipos de transporte industriales, de 22,6 por ciento de combustibles y lubricantes básicos, de 68,8 por ciento de equipos de transporte no industriales, de 41,3 por ciento de partes y piezas para computadoras y de 31,8 por ciento de computadoras y teléfonos. En este último puntos puede resaltarse la baja en las compras de electrónica de consumo en el mercado interno, que llevaron a los principales comercializadores del rubro a lanzar campañas de descuento en conjunto, en un sector en que la competencia es desleal.
En el informe de intercambio comercial del Indec se mencionó que las exportaciones el Mercosur sumaron 1102 millones de dólares, mientras que las importaciones se ubicaron en 1202 millones. Esto implica que hubo un rojo comercial de 100 millones de dólares. Con la Unión Europea, se anotaron exportaciones por 433 millones e importaciones por 751 millones, lo que arroja una caída de 317 millones. Con China, en tanto, las exportaciones se ubicaron en 294 millones y las importaciones en 676 millones, arrojando un déficit de 382 millones. El principal superávit se alcanzó con los países del sudeste asiático. Se exportaron a ese mercado 578 millones de dólares y se importaron 169 millones, lo que resultó en un saldo positivo de 409 millones de dólares para el mes de febrero. Con Chile, que no está en el Mercosur, se registró también superávit por 178 millones.
