Consorcios camineros endeudados: reclaman $ 2 millones a la Provincia de Córdoba

Consorcios-Camineros
Se trata de los entes de Hernando y Las Isletillas que ante la demora del pago de las certificaciones tienen sus finanzas en rojo y sin crédito. Desde hace 8 meses reclaman por la devolución de los fondos invertidos

«Los consorcios camineros así no podemos seguir, estamos endeudados, hay proveedores que no quieren trabajar más con nosotros, nos cortaron las cuentas».

De este modo, Marcos Giraudo, secretario del Consorcio Caminero de Las Isletillas, graficó la situación que vienen padeciendo. «Nosotros, al igual que el Consorcio de Hernando, venimos padeciendo una situación de arrastre desde las inundaciones del 2013. Hicimos muchas obras y reparamos caminos todo el 2014 y cuando certificamos los trabajos en octubre del año pasado, nos dijeron que en dos meses cobraríamos los trabajos. Estamos en mayo y no llegó nada”.

Según señaló, la deuda que la provincia mantiene con ambos consorcios es de más de $ 2 millones.

«No tenemos inundaciones, tenemos deudas”, se lamentó Giraudo. Al tiempo que aclaró que no se trata de ninguna cuestión política pero la realidad es que están con las finanzas en rojo. “Nosotros somos productores, tenemos vocación de servicio, trabajamos porque defendemos el campo y lo que sabemos hacer, pero ya nos miran mal en todas partes,. En el Banco de Las Isletillas nos cerraron la cuenta corriente, tienen razón. Así no nos pueden fiar nada más, después los cheques llegan y no tenemos cómo hacerles frente», sentenció Giraudo.

El consorcista precisó que en octubre del año pasado certificaron una deuda de $ 1,3 millón para la repartición de Hernando y otros $ 700 mil para Las Isletillas, pero los fondos no llegan. “Los trabajos los hicimos con recursos propios y con insumos que gestionamos ante los proveedores locales, pero nos informaron que no tenemos más crédito. La cara la ponemos nosotros, pero está resentida la cadena de pago y es lógico que no quieran trabajar más con nosotros”, aseguró Giraudo.

Aunque la provincia abona históricamente las certificaciones transcurridos unos tres meses, en el caso de estos dos consorcios aseguran que ya acumulan 8 meses de demora. “Hace dos años que venimos tapando pozos y arreglando caminos para poder sacar la producción de los campos, pero si después no recibimos los fondos, es imposible que podamos seguir haciendo los trabajos», puntualizó.

Giraudo agregó que hay zonas complicadas en la provincia y casos urgentes, pero los trabajos ya fueron hechos: “Utilizamos nuestra gente, nuestras maquinarias y compramos insumos, pero de este modo es difícil continuar», indicó.

Cuenca de problemas

Respecto de la zona geográfica en la cual se ubican Hernando y Las Isletillas, Giraudo referenció los problemas que presenta la cuenca.

«La producción en nuestros campos es buena, y estamos en un año llovedor, pero nuestra cuenca debería estar sistematizada en un 90% y está sólo en un 10%. Todos los excesos hídricos que llegan desde las sierras y la zona de Elena, Berrotarán y Los Cóndores, desembocan en nuestra zona, donde se forma un embudo. Comenzamos con unos 50 kilómetros de ancho en las sierras y terminamos con 3 kilómetros de ancho en nuestra zona, el caudal hídrico que llega es tremendo», indicó.

Finalmente, Giraudo, en alusión a la demora en el envío de fondos por parte del gobierno provincial a los consorcios, opinó: «Tiene que ser más expeditivo, pensar en 8 meses o más de demora hace imposible que podamos seguir haciendo trabajos y manteniendo los caminos; hay situaciones críticas en la provincia pero nosotros estamos con el agua al cuello, debemos en todas partes y nos cierran el crédito».

Predisposición, pero sin fondos

Por su parte, Diego Benso, presidente del Consorcio Caminero de Hernando, comentó idénticas dificultades por las que atraviesan, aunque resaltó la «predisposición y buena voluntad del personal de Vialidad, que cada vez que los llamamos vienen y trabajan en conjunto con nosotros, aunque no es facultad de ellos que luego los fondos lleguen en tiempo y forma».

«Nuestra situación es muy complicada y los proveedores que siguen trabajando con el consorcio nos piden que cancelemos las deudas. Otros ya nos cortaron el crédito, estamos acorralados, hicimos los trabajos pero las demoras en el envío de fondos nos está complicando mucho el panorama» agregó.

Fuente: Puntal