Contribuyentes le deben al municipio de Bell Ville más de $ 45 millones
Para tratar de recuperar parte de ese voluminoso crédito a favor de la intendencia, decidieron prorrogar el vencimiento de la moratoria.
Al dejar el máximo cargo ejecutivo local, el exintendente de Bell Ville, Nelson Ipérico, aseguró que los contribuyentes locales le adeudan al municipio más de 45 millones de pesos en concepto de diversas tasas y contribuciones.
Ipérico pidió a los vecinos que paguen esa deuda puesto que el dinero tendrá fundamental importancia para favorecer la gestión de su sucesor en el cargo, el radical Carlos Briner. Tras conocer estas declaraciones de Ipérico, el flamante jefe del municipio decidió prorrogar los plazos de la moratoria lanzada para recuperar parte de esa millonaria mora impositiva.
De acuerdo a los datos aportados por Ipérico la deuda que mantienen los contribuyentes con la intendencia representan el 20 por ciento del actual presupuesto de gastos y recursos, que continuará ejecutándose durante el 2016.
“Hasta el último día de nuestra gestión abonamos los sueldos en tiempo y forma. Pese a nuestra gestión, dejamos más de 45 millones de pesos a cobrar por deudas impositivas que la gente de Bell Ville le debe a la Municipalidad”, indicó el saliente intendente.
En función de la solicitud de Briner, el nuevo Concejo Deliberante aprobó una prórroga de ese plan de facilidades de pago. La intención es sumar más contribuyentes que se adhieran y luego avanzar con otras alternativas que generen un recupero de la millonaria acreencia municipal.
En la última sesión del cuerpo legislativo se aprobó una iniciativa de Ipérico para modificar partidas que estaban previstas para determinadas obras públicas. El objetivo fue poder afrontar el pago de los sueldos de los empleados municipales y además asegurar la prestación de servicios habituales con el pago de los insumos necesarios.
El exintendente recordó que la Municipalidad debió erogar unos 14 millones de pesos propios para poder afrontar los gastos que generaron dos inundaciones seguidas en 2014 y 2015.
Si bien se esperaban ayudas desde la Provincia, el dinero no llegó en la cantidad demandada y por esta razón la administración peronista debió resignar la ejecución de importantes obras públicas.
Además Ipérico recordó que cuando llegó a la intendencia debió afrontar una deuda importante con un crédito de 2 millones de dólares, pero “gracias a Dios se pudo ir pagando todo en los últimos cuatro años”.
