Córdoba: Marcha atrás, la tasa vial subiría menos, excepto para el gasoil
La Provincia recortaría el aumento previsto para el gravamen en combustibles premium. Expendedores denuncian caída de ventas.
A raíz de las duras y extendidas críticas contra el aumento proyectado en la tasa vial, la Provincia reconoció que aliviarán el impacto.
“Somos un gobierno dialoguista. Vamos a escuchar a todas las partes en el tratamiento legislativo del Presupuesto y cambiar lo que haya que cambiar”, dijo el ministro de Comunicación, Jorge Lawson.
Más tarde, fuentes oficiales admitieron que está “la decisión de morigerar el alcance del alza prevista” y que se “hablará con todos los sectores”.
De todos modos, deslizaron que las modificaciones se producirían en nafta y gasoil premium o ultra, cuya suba original es de 67 por ciento.
En cambio, no se tocaría el aumento de 60 por ciento en el gasoil grado 2, el combustible que más se vende. El argumento es que “representa el corazón de la tasa” y que una rebaja de cinco centavos tiene un impacto en el 20 por ciento de la recaudación del gravamen.
Legisladores del oficialismo están elaborando un informe para demostrar que, incluso con la suba propuesta, la incidencia de la tasa será menor a la que tenía en 2012, cuando arrancó.
Reclamo
La Federación de Expendedores de Combustibles (Fecac) volvió a salir ayer con las tapones de punta.
Encabezados por su titular, Pablo Bornoroni, los dirigentes aseguraron que Córdoba “es la provincia en la que más ha caído la venta de combustibles” en el último año. “En promedio, acumula una baja de siete por ciento”, afirmó Raúl Castellano, secretario de la entidad, que reclamó ser recibida el próximo lunes por el gobernador José Manuel de la Sota.
“Sufrimos una suba progresiva de la presión fiscal desde hace cinco años”, se quejaron.
En esa línea, dijeron que en 2010 la alícuota de Ingresos Brutos pasó de 2,28 a 3,25 por ciento en las estaciones, y un año después subió de 0,25 a dos por ciento para ventas mayoristas.
A eso se sumó la creación de la tasa vial, que arrancó en septiembre de 2012. Como las estaciones son los agentes de recaudación de la tasa, acarrean costos administrativos que, en total, implican otra carga de tres por ciento adicional.
“Eso se llama voracidad fiscal”, indicó Gabriel Giaveno, vocal de la institución.
Incidencia
Los expendedores mostraron ayer números sobre la incidencia de los impuestos en los combustibles. La referencia son los precios sugeridos por Axion (Esso).
Según el trabajo, el 48 por ciento del precio final de la nafta ultra es carga tributaria, 45 por ciento es el valor puro del combustible, y el resto representa el transporte y el expendio.
Para ese mismo caso, con un precio final de 14,99 pesos por litro, la incidencia propia de Córdoba (Ingresos Brutos y tasa vial) es de 1,31 peso (8,7 por ciento). Pero la Provincia termina recibiendo 1,46 pesos por litro (20,4 por ciento), ya que vía coparticipación le llega lo que le corresponde por IVA y el Impuesto a la Transferencia de Combustible (ITC).
En promedio, si se toman naftas y gasoil, la captación provincial es de 23,13 por ciento del precio de surtidor. Los expendedores aseguraron que, en lo que va del año, los combustibles subieron 30 promedio.
Puntos de vista
Pablo Bornoroni (Federación de Expendedores). “Venimos sufriendo una suba progresiva de la presión fiscal desde hace cinco años. Hay estaciones que ya no aguantan más”.
Guillermo Borelli (Sindicato Petrolero). “En los últimos dos años cerraron siete estaciones y se perdieron 120 puestos de trabajo. Ahora hay cuatro en riesgo y 80 empleos”.
Agustín Pizzichini (Federación Agraria). “La incidencia de la tasa es muy alta en las economías regionales porque el gasto de gasoil es 10 veces mayor en las tareas del campo”.
Pablo Trapani (Federación Cordobesa del Transporte de Cargas). “Hay productores que contratan a transportistas de otras provincias porque les cobran más barato, al no tener que afrontar la tasa”.
Paulo Graglia (Cámara de Motocicletas de Córdoba). “El 20 por ciento del combustible que se vende es para motociclistas, y el 80 por ciento de ellos vive en hogares pobres”
