El sindicalismo busca espacios de poder en el futuro Gobierno

La disputa de fondo es quienes estarán sentados en el Pacto Social.

Los gremios cercanos a la cúpula de la CGT con Daer a la cabeza se sumaron al Frente de Todos; la Corriente Federal y la CTA siempre se encolumnaron con Cristina Kirchner y el Moyanismo -que ubicó a Facundo Moyano y a Plaini en las listas de la provincia de Buenos Aires- se volvió a acercar a Cristina y mantiene su relación con el Massismo.

Ya se descuenta un triunfo categórico del Frente de Todos. La división de aguas en el sindicalismo continúa entre los que desde el 2015 se opusieron al Macrismo y quienes lo apoyaron en el primer tramo de la gestión de Cambiemos o se divorciaron del Presidente muy recientemente. Por ahora Barrionuevo y los sectores gremiales que lo acompañan, siguen afuera del Frente de Todos.

Sin duda, el Moyanismo se transformó en un sector mínimo, sustentado en el poderoso gremio de Camioneros y un par de pequeñas organizaciones con base en la Provincia de Buenos Aires. También sumaron la alianza de Movimientos Sociales vinculados a la Iglesia como el denominado 21F. Esto le permitió colocar a Facundo Moyano en la lista de Diputados Nacionales- pese a que ya no representa a los trabajadores del Peaje- y como candidato a Senador Provincial al Canillita Omar Plaini. En los acuerdos políticos y la conformación de las listas, los sectores del Frente Sindical para el Modelo Nacional negociaron por separado.

Los Moyano con Massa

Los gremios que permanecieron en la CGT, tuvieron su foto con Alberto Fernández tras el acomodamiento de esos sectores sindicales apoyando la fórmula Fernández-Fernández. En el Frente de Todos, Daer de la CGT proviene del acuerdo con Massa y sumó a gremios del MASA como Ferroviarios y Taxistas.

Con juego propio la UOM que encabeza Antonio Caló, y los Municipales Argentinos conducidos por el histórico dirigente porteño Amadeo Genta, se arrimaron  al espacio sindical más cercano al candidato Presidencial, el que conduce el Portero Santa María, que seguramente ubicará como Ministro de Trabajo al actual rector de la UNET Nicolás Trota. También desde los Municipales de Genta, Alejandro Amor -actual Defensor del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires- es un allegado al grupo Callao que coordina Santiago Cafiero.

El gremio de Farmacia que conduce Víctor Carricarte, cuya figura histórica y emblemática es el fallecido Ferraresi, padre del actual Intendente de Avellaneda, junto con el Piloto Pablo Biró referentes de la Corriente Federal también se vinculan desde la interna política de Capital Federal, con el espacio de Santa María (SUTER) y la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo que dirige Trotta.

La Corriente Federal de Trabajadores con Cristina

La Corriente Federal -que lideran el bancario Palazzo, el Gráfico Amichetti y el Piloto Biró- también colocó varios candidatos y candidatas a Diputados Nacionales, que se sumarán a los ya electos Walter Correa del Cuero y Vanesa Siley de Judiciales de Capital. Este sector, el más vinculado a Cristina Fernández de Kirchner, tras la reunión con la ex-presidenta se incorporó a los Equipos Técnicos del Frente de Todos. Así, la Diputada Nacional Vanesa Siley coordina la Comisión de Trabajo, Carlos Minuchi de APSEE, integra la Comisión de Energía y el Municipal Claudio Leoni –cercano políticamente a la futura ministra de vivienda Maria Eugenia Bielsa- fue sumado en la Comisión de Gestión Pública Federal, Provincial y Municipal. Este sector gremial también tiene entre sus filas a Jorge Rachid que trabaja con Daniel Gollán en los equipos de Salud.

Por otra parte, la CTA que conduce Hugo Yasky tiene candidatos a intendentes por el Kirchnerismo como Edgardo Depetris en Lanús y candidatos a Diputados Nacionales en algunas Provincias. Esta Central también colocó sus cuadros en los equipos técnicos de la fórmula Fernández–Fernández, como el que integra el Tano Catalano de ATE Capital en la Comisión de Gestión Pública Federal, Provincial y Municipal y el ex-intendente de Avellaneda Oscar Laborde en la Comisión de Relaciones Exteriores.

Pero mientras esto ocurre en la lógica del sindicalismo peronista buscando espacios de poder político, en realidad la disputa es siempre por el poder real y la distribución de la renta para los trabajadores. Los anuncios de Alberto Fernández y su compañera de fórmula Cristina Fernández de Kirchner sobre un Pacto Social, o sobre un Consejo Económico y Social para debatir las futuras políticas económicas, sociales y laborales, trae en definitiva como resultado la pregunta sobre quienes asumirán el mayor costo para salir de la crisis y encender la economía.

Cuánto pondrán en esto los trabajadores sindicalizados?

Pedro Costa
(Datos de Infobae y El Destape Web)