En San Juan, la falta de mano de obra retrasa la cosecha de uvas
Así lo manifestaron dirigentes del sector vitivinícola. Por otra parte, destacaron un aumento en los precios de los productos que atribuyen al buen resultado del operativo de compra de uvas del estado.
El Vicepresidente de la COVIAR Ángel Leotta destacó que la actual cosecha de uvas enfrenta luego de los problemas ocasionados por diversas inclemencias climáticas, la falta de mano de obra que retrasa las labores de recolección, al tiempo que el aumento registrado en los precios del mercado, es atribuido al programa de compra de uvas para mosto que instrumentó el gobierno.
Leotta, al efectuar un balance de vendimia actual, sostuvo que “nos está trayendo más de un dolor de cabeza, donde el clima nos jugó una mala pasada con lluvias torrenciales, no se podía a entrar a hacer las labores propias de una cosecha, la recolección de los frutos pero también se agrega ahora la falta de mano de obra”.
Remarcó que “esta falta de mano de obra se agudiza más todos los años en el campo sanjuanino, al igual que en otras regiones del país donde se requiere mucha mano de obra, tal es el caso de la cosecha de cítricos, manzanas o yerba mate”.
La falta de mano de obra “va retrasando la recolección de la uva”, aunque esta demanda insatisfecha de fuerza laboral no es atribuida por los viñateros a otras actividades económicas como la minería que anteriormente requería de gran cantidad de trabajadores especializados sino a la existencia de programas asistenciales.
El dirigente vitivinícola comentó que “no podemos evadir una realidad que plantemos desde hace años y se viene profundizando cada vez más que es que el trabajador que tiene un plan social, no quiere trabajar por múltiples razones, entendibles o no, pero lo cierto es que no se emplea y la actividad productiva se va retrasando”.
Los convenios de corresponsabilidad gremial firmados con sectores de la actividad vitivinícola, son considerados como muy favorables por el sector patronal tanto para el trabajador como para el sistema de seguridad social, al el encuadre legal del personal.
Sin embargo, desde el sector vitivinícola advierten que el trabajador temporario de cosecha que tiene un plan social “se niega a aportar su DNI y su nombre completo porque aducen que perderán la cobertura del programa, impidiendo su registración”.
Leotta remarcó que “el productor debe registrar a todos sus cosechadores ya que la tarifa sustitutiva es por quintal y en función de los kilos que cosecha, es el aporte que debe realizar así lo haga con uno o con diez trabajadores, es la misma cifra”.
Destacó que “la voluntad manifiesta del productor está dada pero el problema es que no puede registrar a todos sus trabajadores porque se niegan a dar sus datos” al tiempo que recordó que “las inspecciones detectan a esos cosechadores que dan datos falsos y no vuelven más a trabajar, dejando un problema detrás que no sabemos como solucionarlo”.
“Con los problemas climáticos, de peronóspora, el productor quiere levantar la uva a toda costa”, remarcó el dirigente.
Otra de las problemáticas del sector, está vinculada a los bajos precios de los productos sobre los cuales, sostuvo que “la falta de uva en esta cosecha, las dos o tres grandes firmas que monopolizan el mercado de la uva y del vino y su venta al público, están aumentando los precios, no solo de la uva sino también del vino de traslado”.
Al respecto, indicó que “nos encontramos con precios con están en alza, tanto para el mosto, como para el vino blanco y el vino tinto”.
El mosto se comercializa entre $2 y $2,10 el litro, con 22 grs. de azúcar que “en esta cosecha en muy difícil de alcanzar, aunque luego se hace un reajuste”, sostuvo Leotta.
Los productores destacan que el operativo de compras de uvas para mosto, implementado por el Estado nacional, posibilitó solucionar un problema de rápida colocación del producto en el mercado y además, permitido una mejora en los precios.
