Menos demanda, más suspensiones
Fiplasto, con 70 años de historia, atraviesa una situación delicada por la baja de ventas y la suba de costos. El rubro de la madera y el mueble perdió 5600 empleos en cuatro años.
10/07/2019 El PaísFiplasto, con 70 años de historia, atraviesa una situación delicada por la baja de ventas y la suba de costos. El rubro de la madera y el mueble perdió 5600 empleos en cuatro años.
Fiplasto, una de las empresas pioneras del sector maderero, volvió a aplicar un esquema de suspensiones para el personal. Con 70 años de historia, la firma explicó que la medida fue tomada por “el nivel de stocks acumulado de mercaderías, como consecuencia de una caída de la demanda de los productos”. El caso de Fiplasto forma parte de la crisis que enfrenta el sector maderero, que en el último año sufrió una caída del 72 por ciento en sus ventas y una pérdida de 5600 empleos en los últimos cuatro años, según datos de la Federación Argentina de la Industria de la
La compañía envió un comunicado a la Bolsa porteña en el que anunció que las suspensiones serán de siete días por mes y el esquema se extenderá hasta el próximo 4 de octubre. Además, le pagarán a los trabajadores el 75 por ciento del salario neto, los aportes y las contribuciones correspondientes a la obra social. La medida fue acordada con el sindicato de obreros y empleados de Fiplasto, según informó en el escrito Alejandro Ketelhohn, vicepresidente de la empresa.
En Fiplasto trabajan más de 350 empleados en los tres complejos industriales que se ubican en la provincia de Buenos Aires, dos en Ramallo y uno en Vedia, dedicados a la fabricación de tableros de madera y muebles, según indica la página web de la firma. En el último estado de resultados difundido por la compañía, registró pérdidas por 68,2 millones de pesos. En 2018 también había tenido que someter al personal a un esquema de suspensiones similar. Fueron 120 trabajadores durante tres meses.
El pasado 20 de junio, día de la bandera, el presidente Mauricio Macri brindó un discurso frente a alumnos de una escuela de Rosario en el que aseguró que desde el gobierno están trabajando con “mesas de competitividad” para reactivar la industria automotriz, la maderera, la carne y la producción de Vaca Muerta. Sin embargo, la situación en el sector maderero es compleja, según datos de la Federación Argentina de la Industria de la Madera (Faima). A lo largo del año pasado, el 72 por ciento de las empresas del rubro tuvieron caída de ventas y el 30 por ciento despidió personal. Se estima que en cuatro años se perderán 5600 empleos directos y el sector se habrá achicado en un 15 por ciento.
Algunos días posteriores al discurso de Macri, el 2 de julio pasado, en una mesa sectorial forestal que lideró Macri, desde Faima agradecieron que se incluyeran los muebles en el plan Ahora 12 pero pidieron más medidas fiscales para aliviar al sector y una línea de financiamiento a tasas subsidiada. “La mesa sectorial es una buena iniciativa, pero los avances que puedan lograrse, como incluir muebles en Ahora 12, van a lucirse en la medida que la macroeconomía avance”, explicó a Página 12 Leandro Mora Alfonsín, economista y director ejecutivo de Faima.
El sector de madera, papel, edición e impresión que mide el Indec cayó 3,8 por ciento interanual según el último índice de producción industrial manufacturero con datos de mayo de 2019. La caída es del 5,1 por ciento acumulada del año respecto a igual acumulado del año anterior. Según una encuesta realizada por Faima, el 43,8 por ciento de las empresas madereras esperan que en los próximos doce meses siga cayendo la producción.