Oposición apura a Mestre para que resuelva la continuidad o no de la empresa Ciudad de Córdoba

La continuidad de Ciudad de Córdoba, en suspenso por ahora.

La continuidad de Ciudad de Córdoba, en suspenso por ahora.

Ayer se conoció que la deuda empresarial con la Afip es de 160 millones de pesos. Sin embargo, la firma consiguió que la Nación le gire los subsidios para abonar los adelantos de sueldos de mañana.

La situación económica actual de la empresa Ciudad de Córdoba pone en jaque su continuidad dentro del esquema local del transporte urbano de pasajeros, ya que se trata de la única concesionaria que opera con un permiso precario. Esto, pese a que fue la propia Municipalidad de Córdoba la que, tras un proceso de licitación donde se supone se evalúa, entre otras cosas, la solvencia de la firma, le otorgó la concesión del servicio aun cuando había indicios claros de problemas financieros. Por caso, desde mucho antes de iniciado el nuevo esquema de servicio, Ciudad de Córdoba enfrentó serios problemas para asumir el pago de los salarios de sus 850 trabajadores en tiempo y en forma. Desde el propio municipio reconocieron que, ante las imposibilidades de pago y para evitar medidas de fuerzas, se le adelantó a la prestataria un total de 14 millones de pesos que aún no fueron devueltos. Aun cuando rige desde comienzo de año la última suba del boleto. En ese escenario, desde la oposición apuran al intendente Ramón Mestre para que resuelva la situación y evitar que los usuarios de los dos corredores que explota la empresa, resulten nuevamente perjudicados.

Los choferes esperan que mañana la empresa deposite el adelanto de sueldo. En caso contrario, amenazan con un paro de actividades en los corredores 20 y 70.

A las deudas millonarias que mantiene Ciudad de Córdoba con el municipio, el gremio y entidades financieras y que fueron informadas ayer por este medio, se le sumó la notificada por la propia Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip): 160 millones de pesos por cargas patronales impagas. Diego Garayzábal, titular de la entidad en Córdoba, dijo ayer que Ciudad de Córdoba lleva mucho tiempo sin realizar los aportes correspondientes y que por ello, se acogió a distintos planes de pagos. Ocurre que desde principio de año, la empresa no realiza pagos y como consecuencia, desde febrero la Secretaría de Transporte de la Nación no le está girando los subsidios correspondientes.
Considerando que mañana se deben abonar los adelantos de sueldos (unos 4.400 pesos por chofer) y que falta poco para el pago del medio aguinaldo, el presidente de la empresa Mariano Llabot viajó ayer a Buenos Aires junto a dos delegados (que en este conflicto se mostraron cercanos a la posición de la patronal) para intentar destrabar el envío de los fondos nacionales calculados en 20 millones de pesos.
A última hora de ayer y tras intensas negociaciones, se conoció que la Afip les firmó un libre de deuda que le permitiría a Ciudad de Córdoba percibir el subsidio nacional y con ello hacer frente a la obligación salarial.

El pedido de la oposición

En paralelo, la oposición al gobierno de Ramón Mestre puso la lupa en la responsabilidad que le cabe al municipio en esta situación: todos los bloques coinciden en pedirle al intendente que intervenga y dé una solución definitiva.

La presidenta del bloque de concejales Eva Duarte, Olga Riutort, criticó “la dilatación del conflicto” y señaló: “Hay muchas cosas que no se entienden. Si frente a una licitación se conforma una comisión de evaluación que estudia y da puntaje a la situación económica, financiera y patrimonial de las empresas que se presentan, previas al acta de adjudicación, ¿cómo es posible que se le haya adjudicado?”. Por otro lado, recordó que para hacer la contrata definitiva del servicio, la empresa necesita presentar una garantía equivalente a 3.500.000 unidades económicas de viajes “que hoy representan 18.550.000 pesos y la empresa Ciudad de Córdoba no ha podido hacerlo, no podemos pensar que el problema está en la refinanciación de la deuda que tiene con Afip”.

Riutort consideró que Mestre tiene dos salidas: “O declara desierta la licitación de los corredores que presta la empresa Ciudad de Córdoba, o le adjudica al que resultó en segundo lugar, si cumpliera con las exigencias del pliego”. En ese caso, los corredores 20 y 70 serían para la empresa correntina Ersa; ocurre que, a partir de las denuncias del propio Llabot, sobrevuela un manto de sospecha sobre lo que podría ser un “negocio con la empresa correntina”.

Por su parte, el edil del Frente Cívico, Esteban Dómina, dijo que “los problemas que evidencia Ciudad de Córdoba no surgieron de la noche a la mañana, aún así el municipio les otorgó la concesión, algo que resulta sugestivo. Si la empresa no puede seguir operando, esos corredores deberían licitarse nuevamente”. Y luego consideró que una salida intermedia y transitoria sería que las otras tres prestatarias conformen una UTE, “de esa manera, no se beneficia a ninguna empresa y sería una solución hasta tanto se licite de manera definitiva”.

En tanto, desde el bloque Unión por Córdoba, Alejandra Martínez dijo que la Municipalidad debe hacerse cargo de esta situación y “el intendente debe tomar una decisión urgente”. La concejala informó que ayer presentaron un proyecto de ordenanza para que todos los subsidios y adelantos que el municipio otorgue a las empresas de transporte, sean autorizados previamente por el Concejo Deliberante. “Es preocupante que el municipio se convierta en la entidad financiera de las empresas. El problema se originó en cómo se planteó la licitación, poco transparente, por eso el intendente debería realizar nuevamente ese proceso pero en todo el sistema. La actuación de la Municipalidad respecto a lo sucedido con Ciudad de Córdoba, roza con lo sospechoso”.

El concejal del Peronismo que Viene, Marcelo Rodio, pidió que “en el caso que la firma continué en incumplimiento de los requisitos de la adjudicación, como hasta el momento, se llame a una nueva licitación”.

Fuente: La Mañana de Córdoba