Pese al reclamo de la oposición, 9 de cada 10 empleados del sector privado están trabajando

En el AMBA, donde la actividad laboral permanecía muy por debajo del promedio nacional, en agosto superó el 80%, según informó el Ministerio de Desarrollo Productivo a minutouno.com.

En el AMBA, donde la actividad laboral permanecía muy por debajo del promedio nacional, en agosto superó el 80%, según informó el Ministerio de Desarrollo Productivo a minutouno.com.

«Dicen que no hay cuarentena, pero hay millones sin trabajar. Me hubiera gustado mayor comprensión», lanzó Patricia Bullrich, actual presidenta del PRO tras fogonear y participar de la marcha anticuarentena en el Obelisco (donde miles de argentinos se juntaron sin distanciamiento social y muchos sin barbijo), desconociendo la irresponsabilidad que significa fomentar una movilización en plena pandemia de coronavirus.

Pero amén de la polémica convocatoria que hizo la ex ministra de Seguridad del macrismo, entre las consignas estaba la liberación absoluta de la cuarentena. A 151 días del aislamiento obligatorio decretado por el gobierno nacional el 20 de marzo, ¿cómo estamos a la fecha en materia económica y apertura de actividades?

Consultados por minutouno.com, voceros del Ministerio de Desarrollo Productivo indicaron que en 21 provincias el empleo registrado del sector privado ya está operativo en más del 90% mientras que en Capital Federal, donde la actividad laboral permanecía muy por debajo del promedio nacional, al 10 de agosto cuenta con el 84% del empleo habilitado para trabajar, y en el conurbano bonaerense asciende al 86%.

Así las cosas, poco más del 10% de los trabajadores formales del sector privado todavía no han podido volver a desarrollar sus tareas, entre ellos los de los sectores turísticos, hoteleros, muchos de los gastronómicos, cultura, arte, entretenimiento, gimnasios, construcción y empleadas domésticas. Para muchos, el Estado les paga hasta el 50% de sus salarios a través del ATP, y seguirá haciéndolo hasta fin de año, mientras que el personal de limpieza y los obreros son de los más afectados porque la enorme mayoría está «en negro» y sólo recibieron el IFE a cambio, que es un bono mensual de $10.000 para un solo integrante de una familia donde haya más de un trabajador informal.

En cuanto al cierre de comercios e industrias, desde el Observatorio Pyme y la CAME coincidieron en señalar a este portal que unas 61.000 (10% del total) de las pequeñas y medianas empresas del país cerraron o están al borde de hacerlo en estos casi 5 meses de cuarentena.

«El número exacto no puede sacarse aún porque la ley de concursos y quiebra que se está por votar en el Senado ayudará a frenar muchos cierres», advirtieron desde la CAME a minutouno.com. Y de igual forma se expresaron en el Ministerio de Desarrollo Económico porteño cuando este portal les preguntó por los 23.000 comercios que Fecoba dijo que ya cerraron definitivamente por la cuarentena.

«No puede haber un dato certero al día de hoy porque fueron abriendo escalonadamente los comercios. Nosotros somos muy cautos con el número de Fecoba y vamos a esperar la apertura total de las actividades para luego comunicar cuántas empresas cerraron en este contexto», aclararon desde la cartera que conduce el ministro José Luis Giusti.

En la Ciudad, el 93% de los comercios, unos 130.000, ya volvieron a abrir. Restan poco menos de 10.000 locales que pueda atender nuevamente al público: son los ubicados en la avenida Avellaneda, Once y en los centros de Trasbordo de Retiro y Constitución, además de los shoppings, los gimnasios y los centros de tatuajes.

En cuanto a la destrucción del empleo durante la pandemia, según la UCA se produjeron 950.000 despidos, de los cuales 650.000 son trabajadores informales. Los 300.000 restantes, en rigor 320.000, son asalariados del sector formal (privados, públicos, monotributistas, autónomos, empleados del servicio doméstico) que dejaron de trabajar entre marzo y mayo.

Y si el ocular reposa sólo en los trabajadores en relación de dependencia del sector privado, hubo una pérdida de 149.000 empleos, en su enorme mayoría no porque fueran despedidos sin causa (prohibido por DNU) sino porque renunciaron, se tomaron licencias o bien finalizaron sus contratos y no fueron reemplazados por otros o vueltos a contratar.

Se trata de una caída ente marzo y mayo del 2,5% del empleo formal, la más alta desde 2002 para un trimestre. No obstante, comparado con todo 2019 (merma anual del 2,5%, la más elevada desde 2009), la destrucción fue menor: 149 mil trabajos menos entre marzo y mayo de este año versus 152 mil puestos menos en todo el año pasado. Para conocer el número final de 2020, hay que esperar a que cierre el año porque en los meses que resta el empleo puede reactivarse, advirtieron desde el Ministerio de Trabajo Nacional.

De hecho, anticiparon a este portal que en junio se ve una recuperación del empleo formal del sector privado. En plena pandemia, las empresas volvieron a contratar.

Fuente: Minuto Uno