Qué es y para qué sirve el ARSAT-1
06/09/2014 El País
El primer satélite de comunicaciones argentino será lanzado al espacio para brindar servicios de televisión, telefonía e Internet. Para eso fue trasladado a la Guyana Francesa, donde se encuentra en este momento. La pampeana Ana Caumo viajará hacia ese lugar en las próximas horas.
El presidente de la empresa estatal de telecomunicaciones ARSAT, Matías Bianchi, precisó que la empresa a cargo del lanzador es Arianespace.
“No hay más de ochos países en el mundo que tengan la capacidad de fabricar satélites geoestacionarios del tamaño del Arsat-1”, dijo Bianchi.
Entre otros servicios que el satélite brindará para la Argentina y todo el continente americano, Bianchi mencionó la “distribución de la televisión digital abierta (TDA), de señales para cableoperadores y de contenidos hacia afuera de la Argentina.
Además, ofrecerá Internet y participará “en la industria de telefonía celular para reemplazar conexiones en lugares donde no las hay y cubrir zonas aisladas”.
Por su parte, el subgerente general de la empresa rionegrina de tecnología INVAP, Vicente Campenni, explicó que “la cobertura de estos satélites incluye no solamente la productividad comercial iluminando las zonas de mayor población, donde hay más negocios, sino también las zonas que son menos rentables pero que se necesitan para el crecimiento social de la Argentina”.
Antes de la llegada del expresidente Néstor Kirchner al gobierno, la empresa alemana Nahuelsat se encargaba de la administración de las órbitas, pero como esa firma privada “empezó a tener problemas de sustentabilidad” y quedaron en riesgo de perderse esas dos posiciones orbitales, el Estado decidió tomar eso activos” y así se creó la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (ARSAT).
“El Estado puede mantener las posiciones alquilando el satélite y brindando servicios, alquilándole el servicio a un operador o fabricando un satélite propio, que es la decisión que tomó la Argentina”, destacó Bianchi.
“Durante ocho meses se realizaron ensayos funcionales y ambientales para garantizar que el diseño, la fabricación y la integración del satélite sean los adecuados para soportar el ambiente severo durante su lanzamiento y los 15 años de vida útil”, detalló Campenni.