Ruta del vino cordóbes: una escapada para seguir descubriendo sabores en invierno

Con más de veinte bodegas que ofrecen visitas guiadas y degustaciones gratuitas, la provincia es el destino ideal para quienes busquen admirar un paisaje de ensueño con una copa de Malbec en mano.

Con más de veinte bodegas que ofrecen visitas guiadas y degustaciones gratuitas, la provincia es el destino ideal para quienes busquen admirar un paisaje de ensueño con una copa de Malbec en mano.

Con las vacaciones de invierno a la vuelta de la esquina, nada mejor que una escapada hacia un lugar que combine paisajes paradisíacos y viñedos. Y ese sitio no es otro que Córdoba, provincia que desde 2009 fue incorporada a los caminos del vino por Bodegas de Argentina.

Los caminos del vino de la provincia abarcan las regiones del Norte cordobés, Sierras Chicas, Traslasierra, Calamuchita y Punilla, con más de veinte bodegas y productores artesanales de vino que ofrecen visitas guiadas por sus establecimientos, catas y maridajes con platos regionales. Además, muchos de ellos completan la experiencia con actividades al aire libre, restaurantes de primer nivel y la posibilidad de descansar en sus hoteles y hospedajes.

Ruta del vino en Córdoba.
Pocos saben que Córdoba fue el lugar donde se desarrolló el primer vino de América latina, la lagrimilla. En la actualidad, la joya de la docta son sus vinos boutiques, que en la jerga significa aquellos vinos que si bien son de poca producción, tienen altos estándares de calidad y tecnificación. En los viñedos cordobeses destacan el Malbec, el Cabernet Sauvignon, el Pinot Noir y el Isabella.

De hecho la lagrimilla, o «vino de misa» forma parte de la carta de La Caroyense, uno de los establecimientos pioneros en el desarrollo vitivinícola cordobés, que data de 1930 y por la calidad de sus productos fue premiado a nivel nacional e internacional.  Además de sus vinos y grandes toneles y barricas, La Caroyense posee espacios de exposición artística, vitrales originales de la época de su apertura e innumerables pasadizos y túneles subterráneos, convirtiéndo en un lugar digno de explorar.

Gastronomía y vino: la combinación perfecta que también se disfruta en Córdoba
Con respecto a la oferta gastronómica, Córdoba siempre se destacó por el cultivo de frutas y la elaboración de embutidos y en los últimos años, su cocina se transformó en un mundo de variados sabores, con platos autóctonos norteños como humita, locro, empanadas y carne a la bandeja, complementada con hierbas aromáticas que resultan la opción ideal para acompañar su paisaje.

Y nada mejor que maridar un buen Malbec cordobés con salame y queso de campo o de cabra, que también se pueden acompañar con conservas de caza, infaltables en las picadas de la zona. Para los dulceros, la provincia ofrece licores, dulces, caramelos, mermeladas de frutos orgánicos (higos, duraznos, tomates, zapallos) y miel.

Los chacinados suelen formar parte de las degustaciones gratuitas que ofrecen las bodegas como Las Cañitas, en el Valle de Calamuchita, otra de las opciones que los visitantes que buscan desconectar del ruido de la ciudad, no se pueden perder. Está ubicada en Villa Berna, un pueblo que une Villa General Belgrano y La Cumbrecita, rodeado de bosques de pino, abedules, cedros y robles.

Malbec, Cabernet Sauvignon, Syrah, Bonarda y Sauvignon Blanc son algunas de las variedades de vinos que posee Las Cañitas, que también tiene una gran producción champanera: fueron pioneros en la venta del champagne en lata. El predio posee seis cabañas bien separadas una de la otra para lograr la máxima tranquilidad y privacidad, con vista al río cristalino, tanto que se puede apreciar el nado de las truchas.

Fuente: MDZ