Los ingresos de los trabajadores se hunden al ritmo de la aceleración inflacionaria y la ausencia de mecanismos de recomposición.
Durante agosto, el índice de salarios del Indec registró un aumento del 2,4 por ciento mensual mientras que los precios escalaron un 4 por ciento.
Las estimaciones oficiales muestran una suba del 42,4 por ciento en doce meses. La cifra se ubica más de 12 puntos por debajo de la inflación que alcanzó al 54,5 por ciento en agosto.
Los sectores más afectados por la pérdida de poder adquisitivo son los trabajadores estatales y los no registrados, de acuerdo a los datos provistos por la autoridad estadística.