Vicentin, en el límite de la «disolución de la sociedad»

La empresa admite en su balance que las consecuencias de su desastroso desempeño, tener un patrimonio neto negativo, "es causal de disolución de la sociedad".

La empresa admite en su balance que las consecuencias de su desastroso desempeño, tener un patrimonio neto negativo, «es causal de disolución de la sociedad».

El balance de sumas y saldos presentado por el Directorio de Vicentin por el ejercicio cerrado el 31 de octubre de 2019 exhibe un quebranto de 52.536 millones de pesos, una vez realizado el ajuste por inflación. El patrimonio neto negativo asciende e 17.502 millones de pesos. «De acuerdo con los dispuesto por el artículo 94 inciso 5to de la ley General de Sociedades», dice la Memoria que acompaña al Balance, «esta situación de patrimonio neto negativo es causal de disolución de la Sociedad por pérdida de su capital social. Sin embargo la ley de Solidaridad y Reactivación Económica 27.541, sancionada por el Senado el 21 de diciembre de 2019, suspende hasta el 31 de diciembre de 2020 la obligación de disolver las sociedades que pierdan el capital o tengan patrimonio neto negativo». Es como si el Directorio de la empresa hubiera escrito su propia sentencia.

Sin embargo, en las últimas líneas de la misma Memoria, el Directorio manifiesta que, pese a su compleja situación, y hallarse en convocatoria de acreedores desde el 9 de marzo, «la Sociedad ha continuado funcionando en prácticamente todas sus plantas, manteniendo los salarios al día y sin producir despido alguno, encontrándose en el proceso de negociación de nuevos contratos que proporcionarán trabajo para todo el ejercicio siguiente».

El Directorio que presenta el balance, con varios meses de retraso y a casi siete meses de haber entrado en convocatoria de acreedores, está encabeza por Daniel Buyatti (presidente) y Alberto Macua (vice). Los directores titulares son Roberto Gazze, Sergio Nardelli (ex CEO, fallecido hace pocas semanas), Máximo y Cristian Padoan; Martín Colombo; Sergio, Pedro y Roberto Vicentin y Yanina Boschi.

Junto a la Memoria y Balance, se presentó la nota de Convocatoria a la asamblea general ordinaria para aprobar dichio balance, para el 15 de octubre próximo, en la que además se prevé el «Tratamiento de renuncias directores titulares y suplentes; determinación del número y elección de los nuevos directores que reemplazarán a los renunciantes hasta el fin del mandato en curso».

El pésimo resultado económico y financiero del ejercicio al 31 de octubre, inexplicable para los bancos acreedopres extranjeros que recibieron un informe de estado de situación al 31 de julio de 2019 que reflejaban una compañía exportadora próspera, es explicado por las autoridades de Vicentin como la consecuencia de un «contexto macroeconómico mundial sumamente volátil en el año 2019», con acontecimientos «tanto en Europa como en Asia y Latinoamérica, dando lugar a procesos difíciles de desentrañar en lo inmediato».

Cita, entre esos elementos, el Brexit (salida del Reino Unidos de la Unión Europea) y «el diferendo comercial por aranceles planteado entre Estados Unidos y China» provocando «severos problemas en la economía mundial». De allí salta a «la recesión ocasionada por la Covid-19, «probablemente la más profunda para las economías avanzadas desde la Segunda Guerra y la primera contracción del producto en las economías emergentes y en desarrollo en, al menos, los últimos seis decenios». Lo curioso es que la pandemia se declaró mucho después de la fecha de cierre de balance, ya que para ese entonces sólo aparecía como una enfermedad localizada en una región de China.

En el plano local, el informe del Directorio de Vicentin marca «el impacto negativo de las turbulencias financieras iniciadas en 2018, que implicaron una revisión del plan económico y la necesidad de contar con un programa de asistencia del Fondo Monetario Internacional, con el objetivo principal de estabilizar las cuentas públicas». «Sin embargo», advierte de inmediato, «una nueva ronda de volatilidad desatada en el mes de agosto de 2019 después que el oficialismo perdiera las PASO, con una escalada del dólar del 50% en un día, puso en suspenso este programa».

Todos estos aspectos, que según el Directorio «impactaron de lleno» en los resultados del ejercicio de la empresa, no afectaron del mismo modo a las demás empresas del sector, que desarrolla la misma actividad, se maneja con los mismos precios y condiciones de mercado que Vicentin. La memoria y balance remite a estas condiciones generales del contexto las causas de la extraordinaria pérdida de 71.512 millones de pesos antes de impuestos (la incidencia del impuesto a las ganancias que refleja el balance tiene un resultado a favor, curiosamente, reduciendo las pérdidas en $18.975 millones). Tampoco da respuesta a las múltiples sospechas sobre intentos de vaciamientos o derivación de negocios en favor de empresas o el holding formados por los mismos accionistas o dueños en Uruguay.

Por otra parte, la empresa intenta justificar en los cambios en el régimen de retenciones que implementó el macrismo durante 2018 (equiparando el tratamiento de las materias primas con los productos elaborados) y en las sucesivas devaluaciones de 2018 y 2019, un graver perjuicio sobre su «agresivo programa de importaciones temporarias» de materias primas, para su elaboración y posterior exportación. Lo llamativo es que estas operaciones de importaciones temporarias fueron, en general, compraventas intrafirma –es decir, con sus propias filiales en países limítrofes–, por lo cual, todo perjuicio por diferencias cambiarias, si las hubo, deberían haber sucedido en beneficio de sus filiales en el exterior.

Fuente: Página 12